VIGILIA OVNI – INVESTIGACIÓN EN VICTORIA, ENTRE RÍOS

Por Silvia Pérez Simondini

El 20 de septiembre, el Equipo de Visión Ovni realizó una jornada de observación y capacitación, que concentraba dos puntos: Baradero (Provincia de Buenos Aires) y Victoria (Provincia de Entre Ríos).

La jornada es parte de la puesta en marcha de un proyecto que se llama “Hangar 34”, que anunciaremos más adelante, pero que requiere de capacitación de observadores en diferentes puntos. Ni bien realizado el lanzamiento, varios equipos y personas de diferentes puntos se sumaron a la experiencia, convirtiéndose en una jornada Nacional.

Los puntos de la Vigilia, quedaron constituidos en:

1.- Victoria (Entre Ríos) Equipo: Visión Ovni

Coordinación: Silvia Pérez Simondini. Cheko Jarsolav y Paulo Colacrai

2.- Baradero (Buenos Aires) Equipo: Visión Ovni

Coordinación: Guillermo Victory y Fabian “Chiky” Escalada

3- Dique La Florida (San Luis) – Equipo: Café Ufológico San Luis

Coordinación: Roberto Quvedo y Fabricio Billardi

4.- Capilla del Monte (Córdoba) –Equipo: GIlatitud 31 Sur /Punto de No Retorno/ Mariela Di Tomaso

Coordinación: Damián Benardis y Jorge Gorno

5.- Pocitos (San Juan) Equipo: Giardianes del Cielo Cuyano

Coordinación: Jorge Perez

6.- Paraje La Araña (La Pampa): Equipo Visión Ovni

Coordina: Salvatore Carta

INTERNACIONAL

7.- West Kendall – Miami (Estados Unidos) Equipo: Proyecto Ufologico Proyecto Sirio

Coordinación: Richard Cardoso

8.- Jesús María – Lima (Perú) Skywatcher

Coordinación: Cesar Terán Sasaki

 

VIGILIA EN VICTORIA – LA LUZ DE LA ISLA

EQUIPO DE INVESTIGACION: 

Cheko Jaroslav / Leonardo Sebastian Luna / Silvia Pérez Simondini

El punto de reunión en Victoria para realizar la vigilia fue el Cerro de La Matanza, lugar relevante para el avistamiento del fenómeno ovni en zona de islas.

Mucha gente nos acompañó para compartir con nosotros lo que normalmente llamamos alerta ovni, que significa la reunión de personas interesadas en el tema para aprender, observar y fotografiar.

Esa noche, desde las 19.00 hs, comenzamos a observar una muy importante luz en zona de islas, llamando mucho la atención de todos los presentes, dado que en esa zona nunca tuvimos la oportunidad de observar iluminación alguna con esas características.

La luz, presentaba una fuerte incandescencia en la parte superior que con su intensidad, podía delinear una estructura a modo de cúpula. En la toma, también puede apreciarse dos luces de colora amarillento naranja con mayor intensidad la que se encuentra en un plano más cercano y con menos intensidad la que está por detrás.

 

 

Paulo Colacrai, Leonardo Sebastián Luna y Cheko Jaroslav tomaron una excelentes imágenes en fotografía y en video, mismas que compartimos en la siguiente exposición.

COMIENZA LA INVESTIGACIÓN

Al día siguiente el equipo queda comprometido a tomar fotografías, en el mismo lugar donde registraron la toma nocturna. El encargado de hacer ese primer relevamiento fue Leonardo Sebastian Luna.

La primera definición es que se trata de una ranchada, que no registraba movimientos. Ante esta verificación Silvia y Cheko, intentan llegar a la construcción precaria por accesos desde tierra. Para ello y dada la posición, intentaron generar ingreso por el lado del camino conocido como “Manatiales” con resultado negativo. La conclusión no se hizo esperar, la única manera de llegar era por agua.

Vale mencionar que Cheko tanto desde el Cerro de la Matanza como desde la zona de Manantiales utilizó el Drone (de última generación) para tratar de identificar por aire la ranchada, con resultado negativo también.

Es bueno señalar que los procesos investigativos, y este caso asi lo demuestra, requiere de los máximos intentos de verificación, que pondrán a prueba la voluntad de los investigadores, ante la frustración del no hallazgo. Sin embargo, la búsqueda siempre obtiene resultados.

LA BAJANTE DEL RIO

Ante la falta de lluvias y la no apertura de las puertas de la Represa Yaciretá, estamos viviendo un período de bajante del río como hace muchos años no vivíamos, constituyendo un paisaje totalmente diferente al que la vista nos tiene acostumbrados.

“en el plazo inmediato los pronósticos anticipan que la falta de caudal se profundizará aún más por la escasez de lluvias en las cuencas superiores”

Para la mejor obtención de evidencia, utilizamos todo tipo de cámaras y la enorme duda que surge cuando el enorme objetivo de Sebastián registra una construcción tipo ranchada muy común en esas  zonas, sobre su ubicación y que luz podría generar esa intensidad, lleva a la decisión del equipo de incursionar por las aguas del río Victoria y dar con el lugar exacto y resolver las inquietudes.

La manifestación de luz estuvo hasta la 02 hs de la madrugada, sin que en ningún momento se apagara, iluminando tanto que la zona estaba totalmente cubierta con la misma.

Silvia Pérez Simondini, comenzó a consultar diversas fuentes conocedores de las islas que no podían dar precisiones de la  construcción. Sin embargo, lo interesante de esta tarea, es que la bajante dio lugar a la identificación de nuevas ranchadas, mismas que se registraron en un mapa.

Por fín después de tanta insistencia dimos con Beto un botero guía de turistas, conductor del trimarán y las lanchas de la empresa Chulengo Safari, que al ver la fotografía, rápidamente mencionó que creía saber dónde estaba esa ranchada y a quien pertenecía.

Sin pensarlo dos veces, nos embarcamos con Sebastián Luna dueño de una de las mejores cámaras y que apoya nuestra tarea acompañándonos con sus conocimientos tecnológicos y profesionales.

Luego de mas de media hora de viaje, llegamos al Espinillo, distante unos 8 km de distancia desde donde tomamos las fotos esa noche. Ahí nos encontramos con dicha construcción que se llama El Gran Pachina.

Tuvimos mucha suerte porque hacía solo unos momentos su dueño, Pereyra, acababa de llegar con turistas.

Por supuesto hablamos con él preguntándole si el 20 de septiembre había estado en la ranchada , y me confirma que sí, y preguntándole que tipo de luz utilizaba, nos dice que una batería con dos lamparitas Leds, de 12 Watts.

No podíamos creer que a 8 km de distancia emanara semejante iluminación. El mismo se asombró cuando le mostramos las fotos obtenidas esa noche.

Nos alegró mucho la gentileza que nos brindaron. Se encontraba con turistas que nos acercaron pan de la isla con salame y queso, comentando también de la luz que siempre veían en la isla.

Aprovechamos este viaje para tomar referencias de todas las ranchadas existentes, lo que llamó nuestra atención que casi todas están cerca del tercer puente Rosario-Victoria.

En la zona de nuestra visita, es la única que existe en el lugar.  Se denomina El Espinillo, y se llega desde el Remanso Basaldúa.

Siempre es una alegría cerrar un caso. La aventura es lo que alimenta el espíritu del investigador. Si bien esta vez no fue un hecho extraordinario, obtuvimos elementos que nos sirven para investigaciones y observaciones futuras. Nuestra gran alegría es haberlo dilucidado como siempre lo hacemos,  para brindar absolutamente la verdad sobre el tema ovni.