EL EFECTO ELECTROMAGNETICO, INTERFERENCIAS EN VEHICULOS AUTOMOTORES Y AERONAVES

“De todos los efectos pretendidamente ocasionados por la presencia de OVNIs, el alegado mal funcionamiento de los motores de automoviles es tal vez el mas enigmatico. Esta denuncia es efectuada con frecuencia, a veces en informes que son impresionantes porque involucran multiples testigos independientes.
Los testigos parecen estar convencidos que el funcionamiento de sus autos fue afectado por el objeto no identificado, el cual a veces no es percibido hasta despues de que la falla es advertida. Ninguna explicacion satisfactoria para tales efectos –si en verdad han ocurrido- es aparente”.

Esta opinion, emitida por Roy Craig, miembro investigador del famoso Proyecto Condon es particularmente valiosa y desusada, teniendo en cuenta que se expresa como Conclusion de un capitulo (Direct Physical evidence), p. 115), del Scientific study of Unidentified flying objects, que -como sabemos- es en extremo critico hacia la realidad fisica de los OVNIs.
Tales afirmaciones provenientes de cientificos escepticos revelan la importancia y complejidad que poseen esta clase de incidentes OVNI..

Para designar este peculiar subgrupo que incluye no solo interferencias en el funcionamiento de vehiculos en tierra y aire, al igual que perturbaciones en dispositivos especificos (radios, television, lamparas, etc.), y tambien en ocasiones fallas electricas de variada intensidad y extension, se ha usado habitualmente la denominacion de “efecto EM” (efecto electromagnetico). Aun cuando se desconocen las causas para esta variedad de informes, el termino parece adecuado en razon de que en la mayoria de los casos las maquinas afectadas operan bajo principios electromagneticos.

Porque, en rigor de verdad, son numerosos los informes sobre detenciones de vehiculos
automotores provocados presuntamente por la presencia de OVNIs, a corta distancia (el catalogo compilado por Mark Rodeghier, sumaba hasta 1981, mas de 440 casos). Las circunstancias en que ocurren estos episodios responden casi siempre a un esquema recurrente. En efecto, es comun que los conductores de tales vehiculos, desplazandose en carreteras, durante horas de la noche o de la madrugada (el 65% de los casos han ocurrido durante la noche), de preferencia en areas rurales o deserticas, adviertan que su motor, pierde potencia o mas generalmente se apagan, aunque casi siempre vuelven a la normalidad cuando el OVNI desaparece. En alrededor de un 45% de los casos hubo mas de un testigo.

La distancia media del testigo al OVNI, de acuerdo a estudios realizados (Mark Rodeghier, UFO reports involving vehicle interference, Evanston, CUFOS, 1981) varia entre 30 y 60 m, vale decir que casi siempre el fenomeno llega a estar suficientemente cerca como para posibilitar una observacion cuidadosa. Segun Donald A. Johnson casi el 80% de las fallas se producen a distancias menores a 120 m.

En cuanto a la duracion de los avistamientos, mas de la mitad de los eventos registrados supera los 4 minutos, lo cual permite que los testigos dispongan de suficiente tiempo para percibir las caracteristicas del fenomeno.
A ello se suma como factor positivo de identificacion, el hecho de que en una alta proporcion de casos, las condiciones meteorologicas fueron favorables para la observacion del OVNI, con muy buena visibilidad (70% de tiempo despejado o parcialmente nublado).

Estos efectos no estan limitados a los automoviles, sino que ocurren en toda clase de vehiculos impulsados por motores de combustion interna (los vehiculos con motor diesel, en cambio, no son afectados de igual manera, o al menos lo son con menor intensidad). Tales incidentes con perturbaciones en circuitos electricos y motores han sido informados para motocicletas, camiones, tractores y otras maquinarias agricolas.
En muchos incidentes, los motores volvieron a funcionar, despues de que el OVNI se hubo alejado, ya sea poniendolos en marcha mediante arranque, o bien de modo espontaneo. En un porcentaje menor, sin embargo, no ocurre lo mismo, e incluso en algunos casos (alrededor de un 7% del total) el deterioro resulta permanente, en sistemas electricos y baterias.
Preciso es destacar que los diferentes componentes del vehiculo no son afectados de igual manera en todos los casos de interferencias. Asi, sobre un total de 351 casos, en 208 la perturbacion es general (motor y sistema electrico); en 71 solo el motor; en 69 solo la radio, en 27 solo las luces, y en 14 solo luces y radio.

Se ha sugerido que estas variantes podrian deberse, en parte, a las caracteristicas basicas de los vehiculos afectados, o al tipo de objeto anomalo involucrado, y tambien a la distancia y posicion del OVNI respecto al automotor. Donald Johnson, en un valioso analisis estadistico ha procurado descubrir el papel que desempeñan estas dos ultimas variables, en las interferencias OVNI sobre vehiculos automotores. Sus conclusiones son de que existe una relacion altamente significativa entre la posicion de los OVNIs y la gravedad de las informadas fallas en el sistema electrico de los vehiculos. En efecto, una substancial mayoria de los casos en que se mencionan detenciones completas de motores señalan que los OVNIs estan al frente o arriba del testigo. Destaquemos que tal situacion ya habia sido advertida por Richard Hall en un trabajo publicado en el año 1960.

Asimismo, Johnson destaca una significativa relacion inversa entre las distancias al OVNI estimadas y la severidad del efecto. Cuanto mas proximo se halla el objeto tanto mayor es la probabilidad de que el motor del vehiculo se detenga. Sin embargo, los resultados del analisis estadistico de Rodeghier, parecen no confirmar esa particular correlacion.

Si bien se tienen noticias sobre casos con efectos EM desde 1909, hasta octubre de 1954, se trata de escasos episodios, aislados y temporalmente dispersos. A partir de ese año su frecuencia experimenta un notable incremento, que se mantiene hasta el presente, aunque con variaciones anuales.

Durante la gran ola de 1954, este tipo de informes se hacen abundantes a partir de octubre en Francia y Europa Occidental. Los trabajos de Aime Michel, Los misteriosos platillos volantes, 1963; de Jacques Vallee, Anatomy of a phenomenon, 1969; y Los Humanoids (numero especial de Flying saucer review, oct.-nov., 1966) rescatan una veintena de informes sobre interferencias electromagneticas, en los meses de octubre y noviembre de ese año.

Tambien la breve pero intensa oleada del año 1957 fue prodiga en informes que describen interferencias en los sistemas de ignicion de vehiculos automotores. En tal sentido, no pueden omitirse los notables avistamientos ocurridos en Lleveland, Texas, los dias 2 y 3 de noviembre de ese año. Un exposicion pormenorizada del los mencionados incidentes ha sido ya publicada en un anterior numero de GACETA OVNI.

Los archivos del Proyect Blue Book contienen muchos otros episodios ocurridos en Estados Unidos en los que vehiculos automotores fueron paralizados por OVNIs, o sufrieron algun tipo de interferencia en sus radios y luces.

Por ejemplo, el 26 de octubre de 1958, alrededor de las 10:30 p.m. (East), dos personas, Alvin Cohen y Phillip Small, que viajaban en automovil a lo largo del Loch Raven Boulevard –cerca de Baltimore, Maryland- vieron, al salir de una curva del camino, un objeto iridiscente con forma de huevo aplanado y de gran tamaño, que permanecia estacionado, oscilando a solo 30 o 45 metros sobre la superestructura del puente numero uno.
Disminuyendo la velocidad, los testigos se aproximaron con el proposito de investigar, pero cuando llegaron a unos 200 o 240 m de distancia del puente, el motor del auto ceso de funcionar y todas las luces se apagaron. Hicieron esfuerzos para poner en marcha el automovil, pero sin exito; muy atemorizados decidieron entonces abandonar el vehiculo y, resguardandose detras del mismo, se dedicaron a observar el objeto insolito durante 30 o 45 segundos. Calcularon que el objeto tendria unos 30 m de longitud. Luego, el objeto proyecto una deslumbradora luz blanca y al mismo tiempo los testigos sintieron una tremenda ola de calor en sus caras. Uno de ellos expreso: “No parecia el calor de un cuerpo incandescente, sino algo asi como luz ultravioleta o algun tipo de radiacion…”.
Con un fuerte sonido “como una explosion amortiguada”, el OVNI comenzo a cobrar altura verticalmente sin variar de posicion durante el ascenso. Mientras se elevaba, su luminosidad iba en aumento y los bordes se hacian mas difusos, de modo tal que no podia apreciarse bien su forma. En 5 o 10 segundos se perdio de vista por completo. Solo entonces el automovil pudo ser puesto en marcha, y las dos personas se dirigieron a la estacion policial mas proxima (Towsen Police Department) para informar del suceso. Ambas tenian el rostro enrojecido y fueron examinadas en el Hospital Saint Joseph, de Baltimore.
Las condiciones del tiempo en el momento del avistamiento excluian la posibilidad de un rayo globular, y no hubo ningun informe visual de un meteorito o de un bolido. La Fuerza Aerea Norteamericana considera el caso como “no identificado”, vale decir, sin explicacion convencional.
(Fuentes: Hynek, J. The UFO experience, p. 121; Vallee, J. Challenge to science, p. 191; Story, R. The Encyclopedia of UFOs, p. 211; Olsen, Th. The reference for outstanding UFO reports, p. 3-61).

Otro episodio de interferencias EM en vehiculos terrestres, ocurrio el 20 de marzo de 1992, en Haynes City (cerca de Orlando), Florida.
Alrededor de las 03:50 a.m., el policia Luis Delgado controlaba las puertas de un local comercial. Al doblar por la 30th Street, percibio una luz verde por su espejo retrovisor. Segundos despues, el interior del auto fue iluminado por un resplandor verde. Un objeto comenzo a seguir al vehiculo policial, moviendose del costado derecho hacia el frente del mismo, en varias oportunidades. Delgado llamo a la Central de Policia a las 3:52 a.m. y solicito apoyo, avisando que “algo estaba siguiendo a su vehiculo”. Cuando el objeto se movio al frente del auto por tercera vez, delgado salio del camino. En ese instante, el motor, las luces y la radio del patrullero dejaron de funcionar.
El objeto tendria unos 15 pies de largo, con un area central de 3 pies de altura y estaba suspendido a unos 10 pies del suelo. Proyecto una luz blancas brillante hacia el interior del auto. Delgado salio del movil e intento llamar a la Central de Policia con su transmisor portatil, pero este no funciono. El policia advirtio que el aire alrededor de el se habia enfriado hasta el punto que podia ver su aliento (hecho sorprendente ya que de acuerdo con los registros meteorologicos en ese momento la temperatura era de unos 60 grados F). Poco despues, el objeto se alejo a fantastica velocidad, en unos 2 o 3 segundos, desplazandose a muy baja altura.
Justo despues de que el fenomeno hubo desaparecido, arribo al lugar otro oficial de policia, quien encontro a Delgado sentado en su vehiculo, con la puerta izquierda abierta y con un pie en el suelo. Estaba tembloroso, lloraba y no podia hablar. Eventualmente se recupero y pudo presentar el informe sobre el incidente. El auto patrullero funciono normalmente despues del episodio y Delgado no tuvo ningun problema de salud. La duracion total del encuentro fue de 2 a 3 minutos.
(Fuente: Sturrock, P.A. Physical evidence related to UFO reports. Seccion 7. Vehicle interference).

Esta clase de avistamientos se producen en el mundo entero. Por ejemplo, Ballester Olmos y Fernandez Peris, en su Enciclopedia de los encuentros cercanos con OVNIs, refieren una docena de episodios con efectos EM en automotores, de la casuistica española. A continuacion relataremos algunos de ellos, con mas de un testigo, en forma sintetica.

Octubre de 1966 (15:30). Figueras (Gerona), mes y año aproximados

Dos personas circulaban por la carretera nacional II, en direccion a Figueras. A 1 km de esa localidad el automovil se paro repentinamente y sus luces se apagaron. Al levantar el capot para examinar el motor, observaron una luz a unos 30 m a su derecha. Se trataba de un objeto elipsoidal, de unos 15 m de diametro, de aspecto solido y metalico. Despedia una luz no cegadora. Segundos despues ascendio repentinamente a enorme velocidad y se perdio de vista. Al desaparecer el objeto, las luces de posicion del coche volvieron a encenderse. El motor tuvo que ponerse en marcha mediante arranque.

2 de noviembre de 1968 (04:35). Bujalaroz (Zaragoza)

Cinco soldados regresaban desde Barcelona a Zaragoza, cuando en el interior de la zona de paramos de Los Monegros, a su izquierda, a menos de 500 m de distancia un enorme objeto, metalico y de color naranja muy brillante y forma lenticular, Al acercarse el coche de los testigos, la radio dejo de funcionar, las luces de los faros disminuyeron de intensidad y los relojes de pulsera se pararon. Tres minutos despues, el objeto que parecia estar a muy baja altura sobre el suelo, comenzo a elevarse suavemente y sin ningun ruido; luego acelero bruscamente y en pocos segundos se perdio de vista. Al desaparecer el fenomeno, faros, radio y relojes volvieron a la normalidad. El automovil era de motor diesel y se comprobo al dia siguiente que tenia la bateria descargada. La observacion duro aproximadamente 5 minutos.

19 de abril de 1974 (22:00). Playa de Valdelagrana, Puerto de Santa Maria (Cadiz)

Una joven pareja, ambos empleados administrativos paseaban por la playa cuando observaron un objeto luminoso a unos 100 de altura y a 300 o 400 m de distancia, que descendia lentamente detras de una arboleda. Los testigos, intrigados, subieron a su automovil y s acercaron al lugar del supuesto aterrizaje. Divisaron, a traves de los arboles, un objeto luminosos que se hallaba estatico, a unos 5 m del suelo. Era de color intenso, con destellos vedes y anaranjados que salian de su parte inferior.
Subitamente el motor del automovil se detuvo. Los jovenes sintieron temor y procuraron poner en marcha su coche, pero el arranque no funcionaba. En ese momento el objeto ascendio en vertical, con un zumbido muy apagado, y de perdio de vista en pocos segundos, a gran velocidad. Despues de algunos intentos fallidos, los testigos pudieron al fin poner en marcha el motor “aunque solo al 40% de su rendimiento total”, pues “la bateria mostraba señales de agotamiento”. La observacion duro unos 8 a 10 minutos.

Tambien nuestro pais ha aportado numerosos casos con efectos EM. En todos ellos es dable observar que se reitera el mismo patron de comportamiento, con casi identica secuencia de fases.
El 10 de mayo de 1964, el industrial riojano Maximo Dughetti, que posee en La Rioja y una planta fraccionadora y fabrica de aceite, conducia su camioneta por la ruta que une Patquia y la capital de la provincia. Junto a el, viajaban unos de sus hijos y su nieto, ambos de corta edad. Cuando se hallaban a casi 20 km de la ciudad de La Rioja. El motor de detuvo de improvisto y sus luces se apagaron. Sorprendido, el conductor se apresto a descender para averiguar la causa de la falla, y n ese instante, desde un bosquecillo situado a unos 40 m y sobre la margen derecha del camino, surgio un haz luminoso de color blanco azulado y de intensidad deslumbrante que se proyecto hacia el automotor. Los niños, despavoridos, comenzaron a llorar, y el Sr. Dughetti atino a protegerlos con una manta. Entones, la luminosidad se extinguio y pudo distinguirse la figura de un objeto circular que se elevaba lentamente con suave ronroneo. En su parte superior se observaba una cupula hemisferica, y de su parte central inferior se desprendian luces rojizas que cambiaban al violaceo. El objeto cruzo diagonalmente la ruta, a no mas de 10 m del suelo y a unos 20 m de la camioneta. Ascendio luego de modo gradual hasta perderse de vista hacia el oeste, en direccion a la sierra de Mogote Colorado. Una vez que se hubo alejado el extraño objeto, el motor del vehiculo pudo funcionar sin dificultad.
La investigacion policial, practicada a la mañana siguiente, descubrio que en un claro del bosquecillo indicado por el testigo la vegetacion aparecia ennegrecida y como quemada en una superficie que tenia la forma exacta de un circulo de 10 m de diametro.
(Fuente: Azcuy, E. Ovnis en la Argentina, en Planeta, nº 5, mayo-junio 1965, p. 150).

Otro episodio muy similar fue el protagonizado en la madrugada del 29 de julio de 1968, por el señor Nestor Norberto Notario –conocido periodista radial- que viajaba en direccion a Mar del Plata, por la ruta nº 2. En su mismo coche trasladaba a su esposa Lydia Beatriz Rodriguez de Notario, cirujana dental, a una prima de ellas, señorita Marta Rodriguez y a un amigo comun, el señor Ruben Papagni, reputado comerciante de la zona.
Poco despues de “La Atalaya” observaron algo semejante a una gran estrella que irradiaba destellos que variaban del rojo al azul y de este al blanco. Estaba animada de un desplazamiento erratico, corriendose de izquierda a derecha y viceversa. Minutos despues lo perdieron de vista. Pero al llegar al km 273 o 274, subitamente, por el oeste, aparecio un enorme elemento que Notario describio como “una palangana dada vuelta” y cuya dimension aproximada podria compararse con la de un vagon de ferrocarril. En su parte inferior, el fenomeno presentaba una luminosidad semejante al hierro fundido al blanco “como el arco de una soldadura electrica”. A intervalos cobraba otras tonalidades, pero siempre semejante a un material en ignicion. Su velocidad de traslacion era de unos 60 a 70 km por hora.
Cuando el cuerpo luminoso cruzo la ruta, lo hizo a reducida altura, quizas no mas de 500 m. En ese instante se interrumpieron los contactos electricos del vehiculo y se apagaron motor y luces. El resplandor que despedia el artefacto era de tal intensidad que “parecia haberse hecho de dia”. El fenomeno prosiguio suavemente su vuelo, sin producir ruido alguno, y lego de aproximadamente dos minutos se poso bruscamente en el suelo. Cuando el OVNI supero la ruta en 200 0 250 m, las luces del coche reencendieron sin que mediara accion alguna de sus ocupantes. El objeto permanecio detenido durante un tiempo considerable, a punto tal que los conductores de unos diez automoviles alcanzaron a detener su marcha para observar el espectaculo. Luego de 45 minutos, el matrimonio Notario se retiro del lugar, mientras que el extraño elemento permanecio otros minutos.
(Fuente: Galindez, Oscar A. Los OVNIs ante la ciencia, p. 68, citando La Capital, Mar del Plata, 30-7-68).

Mucho mas reciente es el caso Chajan, sucedido el 21 de julio de 2002, en la provincia de Cordoba y que tuvo por protagonista a un miembro de la policia provincial.
De acuerdo al informe difundido por el grupo investigador C.O.R., en la fecha mencionada el sargento Guillermo Arias (44 años, casado, tres hijos), que presta servicios en la dependencia de la Policia de Chajan, pequeña localidad de 400 habitantes ubicada sobre la ruta nacional nº 8, a unos 60 km al SE de Rio Cuarto, efectuaba un patrullaje de rutina en una zona rural. Aproximadamente a las 23:00, Arias escucho en su radio que policias de la localidad de Achiras informaban la observacion de luces en sectores de aquella ciudad y que parecian estar tomando rumbo hacia Chajan.
El sargento Arias, al volante de su camioneta logro entonces divisar una formacion de siete luces a la distancia y decidio avanzar unos 10 km por un camino vecinal de tierra. De pronto, el motor del patrullero se detuvo de manera subita y con el envion fue a dar contra un bordo de la banquina. Simultaneamente las luces del tablero del vehiculo comenzaron a prenderse y apagarse en forma desordenada, la radio mostraba en su dial el paso discontinuo de las frecuencias, en tanto que el interior de la cabina se invadia de un olor acre, como de cables quemados.
Atemorizado, Arias, salto de la camioneta y retrocedio unos metros por el camino, y en su huida perdio su telefono celular. De repente, en un campo vecino al camino se encendio una luz inmensa de un objeto triangular (era como un a escuadra puesta de costado, con las puntas bien redondas) que se elevaba lentamente. Parecia –segun describio el testigo- una verdadera “ciudad flotante”, de unos 200 m de largo, con una hilera de “ventanillas” con luces que iban desde el violeta al amarillo, pero muy opacas. Detras de las cuales Arias creyo observar algo que se movia. Describio esos movimientos como televisores que hacen rayas y de sombras a las que definio como “no humanas” (o como “las copas de los arboles cuando el viento las azota). De la parte inferior del objeto triangular salian muchos rayos luminosos color celeste en direccion al suelo. El extraño objeto, siempre en completo silencio, se detuvo sobre el camino –a unos 30 o 35 m de altura y a no mas de 20 m de distancia. Despues de unos 15 o 20 segundos el fenomeno luminoso termino por alejarse hacia el Oeste, desapareciendo tras unas lomadas de un campo cercano. Mientras se alejaba, todo el sector quedo iluminado “como de dia” ya que podia observarse nitidamente campos, alambrados, hacienda, etc.; y esa iluminacion duro unos 20 minutos mas.
Ya repuesto, el sargento Arias regreso a su camioneta y de inmediato dio aviso a otros policias de lo sucedido. Se le informo de que ya estaba partiendo hacia alli refuerzos en su ayuda. Desde Achiras, el agente Barrios trataba de mantenerlo calmo por medio de la radio, al igual que el sargento Medina que fue el primero en intervenir y el sargento primero Cordoba, suboficiales que acudieron de inmediato a la zona donde el camarada solicitaba apoyo. En tanto, otro personal radiaba el suceso a los superiores en la Unidad regional 9, con asiento en la ciudad de Rio Cuarto. Al dia siguiente, la Plana Mayor de la citada unidad policial se hizo presente en Chajan, donde se dispuso una revision medica del sargento Arias y posteriormente una reconstruccion del hecho, para lo cual se movilizaron hasta el mismo lugar de su ocurrencia.
(Fuentes: Informe del grupo C.O.R, entrevista telefonica de Juan Pablo Gomez y la investigacion in situ practicada por Paco Martinez, Patricio Parente y Javier Ferraroto publicada por Carlos Fernandez (Policias a la caza de OVNIs en Cordoba) en GACETA OVNI, dic.2003, Pag. Web.

Un incidente muy notable, que involucra a varios policias de la localidad de Cachi (Salta), es el de la Recta Tin Tin, el 9 de mayo de 2001. Su semejanza con la experiencia de la familia Serena es evidente pese a hallarse muy alejados en tiempo y espacio. Constituye un sorprendente ejemplo de paralelismo ufologico.
La madrugada del 9 de mayo de 2001, la camioneta patrulla n|°301 partio de la dependencia policial de Cachi minutos despues de las 04:00 AM En su interior se trasladaban dos oficiales, un suboficial y, al menos, dos civiles menores d edad (uno del sexo femenino) en calidad de detenidos, que debian ser trasladados al juzgado de menores de la ciudad de Salta, Al volante iba el sargento Humberto Flores (40 años), a su lado, un oficial de mayor rango que no desea ser identificado, y en el asiento trasero (lado izquierdo) viajaba el oficial ayudante Ramiro Corimayo (27 años). Las identidades de los detenidos no fueron dadas a conocer por razones obvias.
Habian recorrido “ Agua de los loros” para iniciar la llamada “Recta Tin Tin”, una cinta asfaltica que se extiende por 18 km atravesando el Parque Nacional Los Cardones.
Justamente a poco de cruzar el cartel que incida el inicio de dicho Parque, el sargento Flores observa hacia el ENE, sobre la cima del cerro Negro del Tirado, una luz blanca de pequeñas dimensiones, a esa distancia, un poco mas grande que una estrella.
El conductor le informa al oficial ayudante Corimayo y le comenta que seguramente se trataba del “farol”, una rareza luminosa tan frecuentemente observada por los habitantes de la region (similar a la “luz mala”, como la conocen en otras partes del pais). Si bien habian escuchado relatos de boca de sus propios protagonistas era la primera vez que tenia la oportunidad de observarla con sus propios ojos.
El oficial Corimayo pidio al sargento Flores que prendiera las balizas del techo del movil policial para darse a conocer. Y ante la sorpresa de todos, esa pequeña ñuz se aproximo y, “en cuestion de segundos, en un solo pestañar”, a decir de Corimayo, acorto la distancia ubicandose a no mas de 400 m de la camioneta, al lado izquierdo de la ruta (NE).
Evidentemente no era, como ellos creian en un primer momento, el mentado “farol”. Se trataba de un objeto de grandes dimensiones (“mas grande que un camion” para Flores, “como de 20 m de diametro”, para Corimayo) con una intensa luminosidad que le daba una forma mas o menos circular y por momentos ovalada, aunque, a raiz de esta, no podian observar el cuerpo (o “estructura”, como ellos mencionan) que se ocultaba e irradiaba tan potente luminosidad.
La luz principal era blanca, pero a su alrededor tenia luces colocadas luces muy brillantes. Asi lo recuerda el oficial Corimayo: “Era un objeto inmenso con luces amplias muy muy fuertes y de todos los colores: violeta, roja, verde…eran asi como chispazos pero espectacular!…”. A ambos le recordaba las esferas luminosas de las discotecas. “Las luces del objeto siempre estuvieron encendidas. Era como un arbol de Navidad, intermitente”.
Los policias decidieron disminuir la velocidad para ir contemplando mejor el fenomeno que habia comenzado a acompañarlos, manteniendo siempre la misma distancia. Ahora la velocidad de la patrulla no superaba los 20 0 30 km/h. “yo no le sacaba la mirada de encima porque intentaba ver su forma” –explico Corimayo quien dada su ubicacion y funcion en la patrulla le era posible poner toda su atencion en el fenomeno.
A partir de ese momento comenzo un “juego” luminoso. Corimayo lo explicaba asi: “A medida que nosotros poniamos la luz baja o alta de la camioneta, lo mismo hacia el (el objeto)” …”Creo que el actuaba conforme a lo que nosotros provocabamos porque al encender la luz del movil policial, el mismo lo hacia; apagabamos las luces ya tambien lo hacia, pero no la luz blanca sino las de colores de alrededor- O sea, prendiamos las balizas y ellos tambien encendian lo que es el contorno de donde despedian los colores…”. “…era como un juego que nosotros haciamos, y respondia en forma simultanea…”.
El ambiente que se respiraba en el interior de la camioneta era de estupor, inquietud y preocupacion. Pues si bien el fenomeno mantenia una distancia prudencial, al menos hasta ese momento, mostraba un evidente dominio de la situacion. Era un objeto que no correspondia en absoluto en su forma, velocidad y caracteristicas luminosas a una aeronave convencional –incluso no emitia sonido alguno- y no obstante habia demostrado tener un control inteligente. De vez en cuando, el objeto ascendia unos cuantos metros y volvia a descender pero siempre continuando la marcha y esas maniobras las realizaba a una velocidad pasmosa.
Los kilometros pasaban y el fenomeno continuaba su escolta. En cierto momento, el sargento Flores, atento al camino, supuso que si el objeto continuaba con igual trayectoria iban a encontrarse al finalizar la recta, a la altura del Paraje Guanaquito. No estuvo errado, porque cuando iniciaron la curva observaron como el OVNI se aproximaba hasta unos cientos de metros y luego lo vieron descender sobre el camino, que en ese tramo ya es de tierra., a unos 100 m de distancia, cerrandoles el paso. Y para sorpresa de todos el motor de la camioneta dejo de funcionar y todas las luces del movil se apagaron.
La preocupacion inicial del grupo, ahora se habia transformado en miedo. A pesar de todo, el sargento Flores y el oficial Corimayo descendieron del vehiculo para contemplar, sin obstaculos de por medio, el extraño fenomeno que continuaba despidiendo su intensa luminosidad blanca y las luces de colores que titilaban intermitentemente por todo su perimetro “cual si fuera un arco iris”. Su resplandor abarcaba unos cuantos metros, llegando a iluminar hasta donde ellos estaban.
Desde esa distancia, y por la forma que irradiaba su luz, no podian precisar si el objeto estaba asentado en el suelo o cerca de este. Lo que si se apreciaba perfectamente era que su tamaño superaba, por ambos extremos, el ancho de la ruta. Tambien confirmaron la ausencia de sonido. Otro detalle que los policias pudieron percibir fue una leve pulsacion en el cuerpo luminoso, como si latiera, acompañando un permanente cambio de forma de esfera a elipse y viceversa.
En ese momento, tanto Flores como Corimayo notaron que dificultades en la vista, sintiendo un ardor en los ojos.
Transcurrido unos cinco minutos de la detencion del vehiculo, de repente, el objeto ascendio en diagonal, hacia la derecha de los testigos, a una velocidad increible (“a un solo pestañazo”), deteniendose en el aire, a unos cientos de metros.
“Como deje las luces en contacto, una vez que se retiro el aparato, las luces se prendieron solas” –aseguro el sargento Flores-. “En ese momento le digo al oficial Corimayo de volver a Cachi, el aparato subio, pero se quedo ahi, sobre los cerros, y el camino se hace dificil en la Cuesta del Obispo. Teniamos miedo que en la bajada volviera a acercarse”.
Sin embargo, los policias decidieron proseguir y retomaron la ruta, siempre a baja velocidad y el objeto recomenzo su escolta, por la derecha, a unos 400 a 600 m. Por momentos se ubicaba al frente, pero sin descender.
Asi transcurrio el resto del viaje hasta que al llegar a Piedra del Molino el OVNI se ubico en la vertical de la patrulla; entonces podian continuar observandolo unicamente sacando la cabeza por la ventanilla. Conforme descendian la cuesta, el objeto parecia estar a mayor altura y por ende, se veia mas pequeño. A la altura de Valle Encantado lo perdieron definitivamente de vista debido a las densa neblina que existia en ese lugar.
La patrulla continuo el viaje a la ciudad de Salta, pero a la media hora debieron detenerse porque tanto Flores como Corimayo comenzaron a sentirse mareados y a tener fuertes dolores de cabeza y nauseas. Estos sintomas fueron menguando cuando, en una quebrada, se refrescaron con agua fria y tomaron unas aspirinas y un poco de coca. Al llegar a la capital los malestares habian desaparecido. Arribaron al juzgado con poco mas de una hora de retraso.
De acuerdo a sus estimaciones, toda la experiencia tuvo una duracion de una hora y media aproximadamente.
(Fuentes: Gomez, Juan Pablo. Caso policias de Cachi. En GACETA OVNI, pag Web; Martinez, F., Parente, P. y Gomez, J.P. Recta Tin Tin: policias escoltados por un OVNI. En GACETA OVNI, pag.Web).

El siguiente informe oficial de la Gendarmeria Argentina describe tambien posibles acciones electromagneticos que interfieren el funcionamiento de los automotores. Lo reproduciremos textualmente:

CHOS MALAL (N), 19 de julio de 1968

OBJETO: Informar observacion OVNI en 160015 jul 66 en el Pje Los Manucos

AL JEFE DEL ESCUADRON 30 “CHOS MALAL”

Informo al señor Jefe que el 160015 jul 68 observe un OVNI desde el paraje “Los Menucos”, en circunstancias que regresaba de “Las Ovejas” en automotor acompañado del siguiente personal:

Sarg Fot DAVID ACOSTA
Sarg Int HERIBERTO SEGUNDO MUÑOZ
Cabo 1ro IGNACIO CASTILLO
Cabo Mec Mot DIONISIO GARCiA
Los detalles de la observacion los asente en el Formulario Nro 03999 de Informacion Tecnica sobre OVNI.

Las percepciones del mencionado personal y las mias difieren entre si en lo que respecta a algunos detalles tales como tamaño, distancia y tiempo, pero coinciden en que se observo un a luz celeste cristalino de gran tamaño y al parecer proxima. Que cruzo delante y por encima del vehiculo en desplazamiento muy lento, detenido por un instante y continuando en forma de descenso vertical, hasta ocultarse tras un accidente del terreno cercano a los observadores.

Al tiempo que se efectuo la observacion del automotor (jeep 1398) perdio su petencia en forma considerable y avanzo dificultosamente en 1era velocidad sobre una pendiente, que normalmente recorre en 2da. Velocidad y desahogadamente. Esa normalidad fue notada por el conductor y el personal restante.

El lugar denominado Pje “Los Menucos” se encuentra sobre la ruta provincial 101 tramo Andacollo/Chos Malal, a 5 km al S del Pje “La Primavera”. Durante el avistaje nevaba y llovia con regular intensidad. Dichas circunstancias, la desaparicion del OVNI, lo abrupto del terreno circundante y la falta de visibilidad imposibilitaron la busqueda en la oportunidad.

Con posterioridad y en compañia del 2do J Esc y el personal que me acompañaba, reconoci el lugar en que presumiblemente hubiera podido descender, sin encontrarse rastros. Asimismo se reconstruyo la observacion del fenomeno determinandose lo siguiente:

a. Duracion de la observacion 20/40 segundos aproximadamente.
b. Forma: alargada, achatada de mayor ancho en la parte anterior (considerando la direccion de desplazamiento).
c. Tamaño aparente: 2mts aproximadamente.
d. Color celeste luminoso sin encandilar, sin aura y sin variaciones.
e. Distancia: inferior a 500 mts considerando que si hubiera sido mayor, habria estado el OVNI oculto de la observacion por una elevacion cercana.
f. Altura angular: 40°/45°.

NESTOR ARTURO PALACIOS
ALFEREZ

Tambien en muchos encuentros aeronauticos se han informado presuntos efectos de indole electromagnetica, en coincidencia con la proximidad de los fenomenos anomalos.
El Dr. Richard Haynes, quien ha investigado extensamente los episodios que involucra a pilotos aereos, reunio en su catalogo mas de 3000 de dichos casos, en un periodo de 51 años (1944-1995). De ellos 185 eventos (aproximadamente un 4%) refieren interferencias en los equipos aeronauticos. El efecto EM tiene lugar a bordo de la aeronave cuando el fenomeno se localiza en las cercanias, pero no antes de su aparicion ni despues de su alejamiento, cuando el instrumental retorna a la normalidad.
Los informes sobre tales efectos incluyen a veces interferencias o fallas completas, aunque temporarias, en el funcionamiento de las comunicaciones por radio y tambien, entre otras perturbaciones menos frecuentes, la reduccion en la intensidad de iluminacion de las cabinas de vuelo, fallas en los sistemas de armas en aeronaves militares, desviaciones en los compases magneticos.
El 18 de marzo de 1965, un bimotor Convair 240, de la Toa Airlines, con 40 pasajeros a bordo, volaba a unos 100 km de Osaka sobre el mar interior de Seto. El piloto Yoshiaki Inada informo a las autoridades que, poco despues de sobrevolar Himeji, un misterioso objeto que brillaba intensamente aparecio junto al avion. Por algun tiempo volo nuevamente al lado del aparato y asi se mantuvo por espacio de 55 millas, a menos de 100 metros de una de sus alas. Mientras el objeto estuvo cerca, el buscador automatico de direccion se vio afectado fuertemente. El copiloto Tetsu Imashima trato de comunicarse por radio con el aeropuerto de Osaka, pero la radio de abordo no funciono. Solo cuando se aproximaron a la ciudad de Matzuyama, en Shikoku, el OVNI desaparecio y pudieron establecerse las comunicaciones.
(Fuente: Edwards, F. Flying saucers, serious business, p. 60).

El 14 de agosto de 1957, un carguero C-47 de la empresa brasileña Varig comandado por el capitan Campos Araujo volaba de Porto Alegre a Rio de Janeiro, a 1.700 m de altura y con visibilidad perfecta. A las 21:00, los cinco tripulantes vieron en el cielo un objeto brillante que se les aproximaba a gran velocidad. Tenia forma de disco con un domo aplanado en su parte superior; cuando alcanzo su menor distancia al aparto, las luces de este disminuyeron hasta casi extinguirse y la recepcion de radio se interrumpio. Todo volvio a la normalidad en el instante en que el objeto se alejo, ocultandose tras una capa de nubes bajas.
(Fuente: op.cit., p. 31).

El caso siguiente responden al mismo patron de comportamiento. El 2 de febrero de 1955, un aeroplano comercial de la empresa colombiana Aeroposta, cumplia su vuelo entre Maiquetia y Merida. Se hallaba comandado por el capitan Dario Celis, quien llevaba como copiloto al capitan B. J. Cortes. Era un dia claro, con visibilidad ilimitada, y el aparato volaba a 2.200 m de altura, cerca de Barquisimeto.
A las 11:15, tanto Celis como Cortes vieron un extraño objeto redondo que habia aparecido de improviso y se dirigia raudamente hacia el avion. Tenia un movimiento giratorio de sentido contrario al de las agujas del reloj. Alrededor de su centro llevaba una banda roja que emitia destellos de intensa luminosidad; debajo y arriba de dicha banda habia “ventanillas” iluminadas.
Apresuradamente, el capitan Celis llamo a la estacion de radio de Barquisimeto, pero casi de inmediato de comenzar el informe la comunicacion se interrumpio. Ese corte repentino afecto por igual al aeropuerto de Valera, desde donde tambien se estaba recibiendo el mensaje del piloto.
(Fuente: Keyhoe, D. The flying saucer conspiracy, p. 240).

El 2 de febrero de 1966, un DC-4 de la Compañia de Aviacion Fawcett, sobrevolaba el oceano, cumpliendo el trayecto de Chiclayo-Lima,. En tal circunstancia sus tripulantes observaron hacia el oeste un punto luminoso, muy distante, que semejaba un cuerpo astronomico o un satelite artificial. El fenomeno luminoso comenzo a acercarse hacia el avion y entonces pudieron constatar que se trataba de un objeto de conformacion eliptica, con una luz blanca en su parte superior y una azul den la inferior. Ademas, parecia despedir una especie de estela anaranjada. El piloto de la aeronave, capitan Osvaldo Sanviti, intento comunicarse con la Torre de Control del Aeropuerto Internacional de Lima, pero la estatica en todas las frecuencias se lo impidio. Las luces de a bordo se habian debilitado y la brujula habia girado 30 grados fuera de su situacion normal. El OVNI acompaño a la aerolinea durante 10 minutos, conservando una distancia estimada en varios kilometros; luego ascendio y lo escolto desde arriba otros tantos minutos, para luego proyectarse hacia el lado izquierdo del avion y continuo siguiendolo por un lapso similar. El objeto desaparecio velozmente hacia la Cordillera de los Andes y entonces los sistemas de radio, iluminacion y orientacion volvieron a funcionar con normalidad.
(Fuente: Galindez, A. Los OVNIs ante la ciencia, p. 64).

La presencia de los OVNIs aparece asociada tambien con otros efectos electromagneticos, tales como perturbaciones en brujulas, compases de navegacion, variometros y magnetometros. Como ejemplificaremos con los casos siguientes, en los cuales puede advertirse, ademas, que las interferencias no ocurren necesariamente cuando el objeto anomalo se halla en proximidad de los testigos, sino, a veces, a mayor distancia.

El 24 de junio de 1947, en la misma fecha en que Kenneth Arnold inaugurara la historia contemporanea de los OVNIs con su avistamiento del Mount Rainier, Fred M. Johnson efectuaba estudios geologicos en la Cadena Cascada, Oregon, para una compañia minera de Portland, a unos 1.500 m sobre el nivel del mar. De improviso, aparecio en el cielo con direccion SE un objeto de forma discoidal. Johnson lo observo con su teodolito durante 45 o 60 segundos. Luego aparecieron otros 5 o 6 discos de unos 9 m de diametro, con una especie de cola, que volaban silenciosamente en formacion irregular.
Estarian a unos 300 m del lugar en que se hallaba el testigo. Mientras los discos estuvieron a la vista (unos 50 segundos aproximadamente), la aguja de la brujula parecio enloquecer, moviendose en todas direcciones del cuadrante como sometida al influjo de un poderoso campo magnetico. Dicho efecto ceso inmediatamente cuando los objetos se alejaron.
(Fuentes: Uriondo, O.A. El problema cientifico de los OVNI, p. 115; Olsen, Thomas M. The reference for outstanding UFO sighting reports, p. 3-2).

El 12 de marzo de 1957, el vuelo 94 de la United Airlines viajaba desde San Francisco a Boston. Eran las 21:05 EST, y se hallaba entre Buffalo y Albany, N.Y. con cielo claro, excepto un parcial nublado hasta 20 millas al frente. La aeronave, un DC-10 volaba con piloto automatico a una altitud de 37.000 pies, con una velocidad de 539 nudos.
Cuando el avion se hallaba al sur de Syracuse, N.Y, de repente, comenzo a girar hacia la izquierda, haciendo una inclinacion de 15 grados. En poso segundos, el primer oficial y el capitan miraron al costado izquierdo de su aeronave y percibieron una luz blanca, muy brillante, a su misma altura. A continuacion, el ingeniero de vuelo tambien miro y percibio la fuente luminosa, Parecia ser perfectamente redonda y su diametro era de unos 3 grados de arco. Sin embargo, el capitan estimo que el objeto se hallaba a unas 1.000 yardas de distancia y tendria un tamaño de 10 pies, que corresponde a una dimension angular de 2 grados de arco.
El capitan noto que los tres compases en la cabina (que usa sensores en distintas partes del avion) estaban mostrando diferentes lecturas. En ese instante, el copiloto apago el piloto automatico y tomo el control manual de la aeronave.
Haines calculo la distancia aproximada del objeto en unas 10 millas nauticas. Parecio acompañar al avion por 4 o 5 minutos, luego de los cuales se alejo muy rapidamente, desapareciendo en unos 15 segundos detras de la aerolinea y hacia el oeste. El capitan pregunto a la torre de control en tierra si ellos tenian algun trafico en el radar y recibio una respuesta negativa.
El capitan considero varias explicaciones para el mal funcionamiento de los tres compases y acepto como la mas probable que un transitorio campo magnetico podria haber perturbado los dos compasases magneticos primarios. El sensor ubicado en el ala mas proxima al objeto habria sido mas afectado que el sensor de la otra ala, Luego de aterrizar, los compases fueron revisados y se encontro que se hallaban en condiciones operativas normales.
(Fuente: Sturrock, P. Physical evidence related to UFO reports, seccion 8: Interference with aircraft equipment).

La noche del 12 de noviembre de 1963, el transporte de la Armada Argentina “Punta Medanos” navegaba en ese momento en aguas del Atlantico Sur, a la altura de Golfo Nuevo. De pronto, un objeto aereo, redondo, de velocidad uniforme, sin luces, siguio al navio a unos 2 km de su popa. Aunque su transito fue muy breve, las agujas de los compases de abordo saltaron bruscamente fuera de curso (en 25 grados a una banda) y recien se pusieron nuevamente a rumbo despues de 55 minutos de oscilaciones amortiguadas. La investigacion subsiguiente considero todas las posibles causas habituales para el sorprendente fenomeno. Pero al fin se debio desecharlas y admitir que la alteracion solo podria haber sido provocada por la presencia del OVNI.
(Fuente: Galindez, A. Los OVNIs ante la ciencia, p. 68).

El 3 de julio de 1965, a las 17:03, cuando era ya noche en esa latitud, Los meteorologos Jose Mazzucchelli y Eduardo Jarrik avistaron un objeto redondo, de color blanco azulado, que se desplazaba en el cielo de Este a Oeste. Su tamaño era mayor que el de una estrella de primera magnitud, y fue observado por el termino de 15 segundos. En el momento de su paso, los variometros señalaron una visible perturbacion. El avistamiento fue ratificado por el jefe de la base, teniente de fragata Miguel Sosa,
(Fuente: op. cit., pag. 78).

Sobre San Carlos de Bariloche, la noche del 31 de julio de 1995 (circa. 20:45), el Boeing 727-200 de Aerolineas Argentinas, vuelo ARG-674, se disponia a aterrizar en la pista del aeropuerto internacional de esa ciudad. En dichas circunstancias las luces de la aeroestacion se apagaron repentinamente. La aeronave descendia acompañaba a babor, en formacion (y a unos 100 m de su ala izquierda), por una configuracion luminosa de colores verde y anaranjado. Coincidentemente, en la Torre de Control, su operador el sargento Ayudante Alfredo R. Blanco, advirtio una serie de extrañas alteraciones en el instrumental. Este es el relato textual del testigo:
“En el pasaje que hizo (20:48) –se refiere al Boeing 727-200- lo que mas me extraña es que estos equipos: el que nos da el QHH, que vendria a ser la presion a nivel del aeropuerto; el que nos da la intensidad y direccion del viento; el que nos indica la altura de las bases de las nubes, es decir una serie de equipos que no trabajan en bateria, se apagaron con la caida del grupo electrogeno de la aeroestacion, pero cuando la aerolinea estaba practicamente arriba de la torre, en ascenso, observo extrañado que los equipos vuelven a prenderse y comienzan a comportarse de manera muy extraña: el equipo que indicaba la direccion del viento giraba constantemente, los que indican, en numeros, la velocidad y altura de las nubes, subian y bajaban, al igual que el barometro ¡Y eso que no funcionan a baterias! Solamente el HT, que utilizo para hablar con los pilotos, continua funcionando, pero a bateria…y sigo mirando los demas equipos y veo que ningun otro se prendio.
Por su parte, el observador meteorologico del aeropuerto Nicolas E. Araya, mientras controlaba su equipo se vio sorprendido por el descalibre del barometro que subia y bajaba en forma continua. Quince minutos despues, todo volvio a la normalidad.
(Fuente: Gomez, J.P. y Uriondo, O.A.. Informe sobre el caso Bariloche, v. Parte Terceraa de este trabajo).

Finalmente, rescatamos un curioso episodio en el cual la proximidad de un objeto anomalo tuvo por consecuencia la magnetizacion de implementos metalicos.
La tarde del 14 de abril de 1957, a las 15:00, las señoras Marie Garcin y Julia Rami, paseaban por la ruta departamental 24, cuando un atronador ruido metalico las hizo darse vuelta. A un centenar de metros de donde se hallaban, descendio sobre la misma ruta una pequeña “maquina” de color metal mate, en forma de cono con la punta dirigida hacia abajo. Parecia un trompo gigante, de un metro y medio de altura y casi un metro de diametro maximo, con la cuspide convexa. De las paredes del cono, perpendicularmente a el, salian plumulas de aspecto metalico, multicolores y paralelas entre si, que se agitaban con rapidos movimientos vibratorios. El objeto sobrevolaba lentamente, a 2 o 3 m del suelo, el cruce de la departamental 24 con el camino de Vins sur Caramy, Francia. El alboroto provenia de uno de los dos tableros indicadores del cruce que vibraba intensamente, como si hubiese una concordancia entre el movimiento de las plumulas y el tablero.
Aterrorizadas, las dos mujeres gritaron. A unos 300 m de alli, sobre una colina proxima, otro testigo, el señor Jules Boglio, escuchando los gritos de las testigos y el ruido del indicador, acudio presuroso creyendo que se trataba de un accidente de transito. Tambien diviso la “maquina”, a la cual describio en terminos identicos. En ese instante el objeto dio un repentino salto por encima de la carretera y realizo un ligero viraje hacia el Este, desplazandose a 5 o 10 m de altura. Al sobrevolar el segundo tablero indicador, este comenzo a vibrar y oscilar, produciendo una fuerte resonancia metalica. Luego el objeto conico volvio a posarse a 200 m del primer lugar del cuasi-aterrizaje, en un camino de tierra apisonada; se detuvo algunos segundos, se elevo otra vez y, al fin, acelero dirigiendose hacia el sudeste a velocidad moderada. Todas sus evoluciones fueron cumplidas en silencio y en ningun momento el objeto en si produjo ruido. La duracion total del avistamiento fue de un minuto.
La investigacion posterior efectuada por la policia local y el Sr. Jimmy Guieu de la comision Ouranos comprobo que los tableros indicadores sobre los que habia volado la “maquina” estaban imantados y que la aguja de la brujula experimentaba una desviacion de 15 grados, a 5 cm de distancia, mientras que, en las mismas condiciones, un tercer tablero, mas alejado, no producia ninguna desviacion. Colocando la brujula cerca del automovil en el cual los investigadores habian llegado, mostro una desviacion de solo 4 grados.
(Fuente: Uriondo, O.A. El problema cientifico de los OVNI, p.118; Hynek, J.A. The UFO experience, p. 134; Michel, A. Los misteriosos platillos volantes, p. 301).

Conclusiones generales sobre el efecto EM

Como ya habiamos subrayado en paginas anteriores, no en todos los casos de Encuentros Cercanos se producen efectos electromagneticos. Esta situacion es importante pues pareceria indicar que el llamado efecto EM –con sus variedades- no es necesariamente consecuencia colateral a la presencia del OVNI (por ejemplo, a un eventual sistema de propulsion) y sugiere que en algunos incidentes asociados a tales efectos se manifiesta una accion deliberada y selectiva por parte del fenomeno anomalo. Estariamos, pues, en esos casos ante un comportamiento intencional, aunque por ahora tal inferencia es solo especulativa.
No son muchos los trabajos de investigacion tecnica publicados sobre los eventuales mecanismos causales de las interferencias electromagneticas. Podemos mencionar a James McCambell (Ufology, 1973; UFO interference with automobile electrical system, 1976); Mark, Rodeghier (UFO reports involving vehicle interference, 1981); Donald A. Johnson (The effects of position and distance in UFO ignition-interference cases, 1981), y Geoffrey Fallas (BUFORA Vehicle interference Proyect report), que evaluan diversas hipotesis al respecto.
En general, estos autores opinan que la presencia de un intenso campo magnetico no es la unica respuesta para los efectos EM, como se suponia al comienzo. Experimentos realizados en 1967, por la Ford Motor Company, trabajando para la Universidad de Colorado, concluyeron que un campo magnetico lo suficientemente fuerte como para provocar la detencion del motor de un vehiculo, tambien afectaria el normal registro magnetico del coche en forma permanente y en consecuencia podria ser verificado, lo cual no sucede en la gran mayoria de los casos. Estas conclusiones han sido puestas en duda, por experiencias posteriores como las practicadas por F.C. Gillespie, en EE.UU y por Watts, en Inglaterra. Por su parte el cientifico norteamericano James M. McCambell sugiere que tales efectos podrian estar relacionados con la existencia de un campo electromagnetico fluctuante, que sin alterar la condicion magnetica del automotor, interferiria el funcionamiento de faros, radios y motores mediante una radiacion electromagnetica de alta frecuencia emitida por el OVNI.
Tambien los analistas coinciden en señalar que la faceta mas inexplicable y sorprendente es la normalizacion espontanea, sin asistencia del conductor, de los sistemas electricos interferidos (en opinion de muchos mecanicos de automoviles este tipo de comportamiento es “imposible”). Dichos casos, aunque muy infrecuentes (alrededor del 5% del total de eventos EM), existen en un porcentaje significativo. El “auto-arranque” del vehiculo ocurre solo en conjuncion con el alejamiento del OVNI, ya sea simultaneamente o rato despues (segundos o hasta pocos minutos como maximo), aun cuando los esfuerzos del motorista por ponerlo en marcha hayan sido inutiles, mientras el objeto estuvo proximo.

Ante las dificultades de hallar una causa unica para todos los eventos EM, muchos investigadores del fenomeno OVNI ultimamente han sospechado que esta subclase de manifestaciones es generada en realidad por mecanismos sustancialmente distintos. Y quizas actuen incluso influencias fisicas desconocidas hasta ahora para la ciencia actual