APARECIÓ UN TERNERO MUTILADO EN VICTORIA, ENTRE RÍOS

LAS HERIDAS SON INCREIBLES, PERO MAS DIFICIL DE EXPLICAR ES, COMO EL ANIMAL APARECIO EN ESAS CONDICIONES EN MENOS DE 24 HORAS. 

Este último jueves 29 de agosto, cuando los arrieros hacían la recorrida del campo cercano a la zona de la Laguna del Pescado, no imaginaban que esta mañana de viernes, iban a encontrar al ternero con este corte en el maxilar. 

Cuando vimos la imagen, recordábamos que hacía tiempo que no veíamos un corte tan perfecto. Sin, embargo, solo se observó esta única herida. No había corte anal, ni desaparición de pabellón auricular, ni corte parcial o total de lengua u órgano ocular. Todo estaba allí. 

Silvia Pérez Simondini, entra en acción, luego que Néstor Gaioli, toma conocimiento del caso, y por pedido de todas las partes, se va a mantener reserva del lugar de los hechos y el nombre de los intervinientes, en situación de preservar la investigación de cara al futuro, ya que este ternero, es el tercer caso en menos de un mes. Si leyeron bien, tres casos, que ciertamente llevan a asustar a los lugareños y propietarios de la hacienda, que llevaron a que los animales ni bien son descubiertos, son quemados para tapar todo tipo de situación, médica y de curiosos. 

La descripción que se hizo del caso, es que durante la tarde de ayer el ternero se lo vio en perfectas condiciones y con vida y que esta mañana apareció con este corte en la zona del maxilar. En las fotografías aportadas, sde puede apreciar el corte «aserrado» y un desprendimiento muy interesante del tejido (una característica no vista en otros casos, cual se hubiera actuado un instrumento. (ver imagen inferior)

Otro hecho que llamó la atención de los lugareños, es que el animal en 24 hs, presentó una hinchazón que comúnmente lleva días y que el animal despedía un olor a putrefacción muy fuerte, poco común, también, por el tiempo transcurrido. 

Otra de las acciones practicadas por los hombres de campo, es que cortaron parte del animal para alimentar a los perros, y estos no solo no tocaron la carne, sino que salieron despavoridos. Entendemos que el estado del animal por hinchazón y olor, era de descomposición y podría explicar la reacción de los canes. 

El animal se encontró pegado a una serie de arbustos y yacía muerto, en el mismo lugar donde lo habían visto vivo horas antes. 

Ante la pregunta de Silvia sobre si habían observador luces por la zona, en relación al hecho, la respuesta fue negativa. Sin embargo asomó nuevamente el relato de los famosos «colectivitos» que el padre de uno de los observadores, supo ver tres veces, siendo una de ellas, la que mas asombró al testigo, cuando quedo suspendido arriba del tanque australiano, impactando profundamente al hombre, logrando que nunca más regrese a trabajar al campo. 

No podremos avanzar más en este caso, pero estaremos atentos, porque claramente como reza el libro de Silvia, «Algo está pasando en Victoria?»