EL CASO BARILOCHE (6 PARTE)
Analisis de una copia de la cinta del audio con el registro parcial de las conversaciones entre los aviones ARG-674 y GN-705 con Torre de Control Bariloche (31/7/1995)
Juan P. Gomez y Oscar A. Uriondo
Introduccion
A fines del año 2003, llego a nuestras manos (por canales no oficiales) este valioso documento relacionado al avistamiento OVNI ocurrido el 31 de Julio de 1995 sobre el aeropuerto de San Carlos de Bariloche (Pcia. de Rio Negro- Rep. Argentina).
El hecho –conocido a posteriori como el Caso Bariloche- tuvo una notable repercusion periodistica a escala mundial, como pocos sucesos OVNI habian alcanzado hasta la fecha. Y ello debido, esencialmente, por los siguientes tres factores:
• Las caracteristicas del avistamiento: un OVNI (1) sobrevolo un aeropuerto en el preciso momento en que dos aviones –uno de Aerolineas Argentinas (ARG-674) y otro de Gendarmeria Nacional (GN-705)- se encontraban aproximandose a la zona. El fenomeno escolto al avion de linea, en la etapa final del procedimiento de aterrizaje, a escasos 100 metros y durante 2 minutos. Estando este a 7 millas de la pista, y con el objeto en formacion, un corte de energia en el aeropuerto lo obligo a realizar una maniobra de escape. Desde el otro avion –el GN-705- y desde el aeropuerto tambien fueron testigos del o los fenomenos.
• La cantidad y nivel de los testigos involucrados: Desde el aire, las tripulaciones del avion comercial y de Gendarmeria Nacional. Desde tierra, personal de la Fuerza Aerea Argentina y civiles tanto en el aeropuerto como de barrios aledaños. Hasta la fecha fueron 16 los testigos confirmados: 4 en el ARG-674, 3 en el GN-705, 4 operarios del aeropuerto (2 en torre de control y 2 desde el edificio principal) y 5 civiles (dos en el aeropuerto y tres en barrios proximos al lago Nahuel Huapi.
• Las declaraciones publicas de los pilotos: Fue un verdadero impacto en la opinion publica observar como experimentados pilotos –civiles, por un lado y de una fuerza militar, por el otro- narraban publicamente los pormenores de un avistamiento OVNI. Y lo hacian sin restricciones, desafiando el ridiculo a los que siempre son expuestos, lamentablemente, los testigos OVNI.
No fue un caso aislado. Durante todo el año 1995 la Republica Argentina vivio una oleada de denuncias OVNI que llevo a la prensa a informar periodicamente sobre estas (2). Fue tanta la conmocion que origino este avistamiento que, al menos en nuestro pais, alcanzo igual o mas atencion que la famosa filmacion sobre una supuesta (y luego confirmado fraude) “autopsia de un ser extraterrestre” que en esas fechas estaba por salir a la luz, precedida por una intensa campaña publicitaria (3).
Iniciamos la investigacion de este suceso a principios de 1996. Durante cuatro años nos dedicamos a reunir material y a entrevistar a la mayoria de los testigos; sin embargo la misma aun no ha concluido. En nuestro informe preliminar deciamos que este suceso podia compararse con un enorme puzzle, en el cual algunas piezas habiamos logrado ordenar pero otras, todavia, no han encajado. Circunstancias y detalles de algunas observaciones no estan del todo claro aun. La imperiosa necesidad por esclarecerlas fue la que nos condujo a la obtencion de este documento.
Y la busqueda de informacion, a pesar de los años transcurridos, continua (4).
Para aquellos que no conocen los hechos o bien para los que desean recordarlos, le facilitamos el acceso a nuestro trabajo anterior haciendo click en las direcciones adjuntas.
El documento analizado en esta oportunidad –y que hacemos publico en forma integra tal cual lo hemos recibido- es una copia parcial de la cinta de audio de la torre de control del aeropuerto de Bariloche (BAR-TWR) con las conversaciones que mantuvieron las tripulaciones de los aviones con el torrero, Suboficial Ayudante Alfredo R. Blanco, mientras eran registrados visualmente los fenomenos. Y si bien es un documento muy valioso, no es inedito en cuanto a su contenido, ya que la transcripcion del mismo (Expediente de la FAA del 04/10/95) fue hecha publica en nuestro informe preliminar como asi tambien por otros investigadores del caso en varias paginas web. (Nestor Echarte, Lic. Heriberto Janosh).
Por ultimo, resta aclarar que este trabajo estara divido en tres partes.
En la primera, que lleva por titulo “Obtencion del documento”, el lector encontrara el relato de como llego a nuestras manos este material Y si decidimos hacerlo fue, esencialmente, para evitar suspicacias futuras que pretendan poner en dudas nuestras fuentes, como ha ocurrido con la obtencion de los documentos que nos fuera entregado por la Fuerza Aerea, a traves del aeropuerto.
En la segunda (“Contenido”), encontraran la transcripcion completa de las conversaciones, segun el expediente de la F.A. mencionado -que servira de guia para escuchar el audio- intercalado por los tiempos que arrojo el cronometraje del mismo; el cual nos permitio conocer con mayor precision la duracion de los registros visuales del o los fenomenos.
En la tercera –y ultima parte- (“Analisis, especulaciones y conclusiones”) haremos una revision de los avistamientos que se registraron durante el periodo que dura la grabacion, sobre la base de los nuevos datos que esta arroja
Primera Parte: Obtencion del documento
(Narrado en primera persona por Juan Pablo Gomez)
En el primer viaje a la ciudad de Bariloche, en 1996, conoci a Jose (seudonimo para mantener en reserva la identidad del autor de la copia). Una persona del aeropuerto me habia sugerido que hable con el pues era un interesado de la tematica OVNI y, quizas, podia aportar alguna informacion valiosa a nuestra investigacion.
Al dia siguiente encontre a Jose en uno de sus trabajos. Luego de presentarme, iniciamos una conversacion que resulto por demas interesante.
Jose era, efectivamente, un interesado en la investigacion del Fenomeno Ovni desde bastante tiempo atras, y mientras vivio en Buenos Aires habia sido miembro de un grupo de aficionados a la ufologia. A poco de iniciar la charla, me dijo –a manera de confesion- que tenia en su poder una copia de la cinta de audio del grabador de torre de control con las conversaciones entre esta y las tripulaciones de los aviones, durante el avistamiento. Sin embargo, se adelanto en aclarar, por una cuestion de prudencia y de reserva preferia no ofrecerme una copia, al menos, no por el momento. En respuesta a su confesion le comente que, si bien no contabamos con el audio, ya teniamos la transcripcion de esas conversaciones (1). La charla continuo sobre otros aspectos de los avistamientos ocurridos esa jornada en particular y sobre el fenomeno OVNI en general. Antes de despedirme le extendi una tarjeta con mis datos y le pregunte por su nombre completo para poder agendarlo. Su respuesta fue: “- Por ahora, solo te digo que me llamo Jose… Si queres mandarme algo por correo, hacelo a la casilla Nº xxx a nombre de Jose y listo..”. Respetando su decision de mantener en reserva su apellido, nos despedimos. Hasta el dia de hoy, no he vuelto a verlo personalmente.
Ya en Buenos Aires, comente con Oscar Uriondo los pormenores del viaje y de la entrevista con Jose. En ese momento, francamente, no vimos la necesidad de obtener una copia de la cinta con las conversaciones dado que conociamos su contenido; ciertamente habia otros aspectos de los avistamientos que requerian mayor atencion y dedicacion. Y el asunto quedo archivado.
Con el tiempo, y a medida que nuestra investigacion avanzaba, comprendimos que en cierta forma habiamos subestimado la importancia del material que Jose tenia en su poder. Poco a poco el audio de la torre de control se fue haciendo necesario para ir aclarando algunas dudas que surgian luego de las entrevistas con los testigos, como asi tambien –porque no- para conocer con mayor precision los tiempos de los registros visuales de los fenomenos por parte de los pilotos.
En octubre de 1998 viaje por segunda vez a Bariloche. Varios eran los objetivos a cumplir en esta oportunidad, entre ellos, localizar nuevamente a Jose. Para tal fin me dirigi a su lugar de trabajo donde lo habia conocido en 1996, pero alli ya no estaba. Al parecer se habia mudado a Buenos Aires y la persona que ocupaba su puesto tampoco recordaba su apellido.
Dada las circunstancias, supuse que tendria que intentar obtener una copia presentando una solicitud a traves del Edificio Condor (Fuerza Aerea Argentina), como habiamos hecho con los informes. Pero antes, aprovechando una serie de entrevistas en el aeropuerto, probe suerte consultandole al respecto al Suboficial Principal Daniel A. Garcia; claro que sin revelarle la existencia del duplicado en manos de Jose.
La respuesta del jefe de operaciones no fue para nada alentadora. Garcia me explico que transcurrido un tiempo prudencial los cassettes que utiliza la torre son re-grabados, por tanto, resultaba dificil que el aeropuerto la conservara; mas aun habiendose hecho una transcripcion de su contenido. De todas formas, si mi intencion era realizar una solicitud del material debia hacerlo, en primera instancia, con autorizacion del Comando de Regiones Aereas, en Buenos Aires. Aunque tampoco habia muchas esperanzas de obtenerla de esta manera porque cuando la Jefatura del aeropuerto elevo los informes, envio la transcripcion del audio y no una copia.
Deje la oficina del jefe de operaciones pensando como localizar a Jose en Buenos Aires, claro que existia un “pequeño” detalle en contra: desconocia su apellido y solo contaba con sospechas de su posible paradero.
A ello me aboque en los dias posteriores a mi regreso. Me comunique telefonicamente a los posibles destinos que me habian informado pero, sin el apellido, no tuve suerte. Ante los resultados negativos, decidi esperar. El tiempo y la paciencia suelen recompensar las busquedas mas complejas, haciendo simple lo que en un principio resulta dificil.
Al año siguiente, en octubre de 1999, tuve la oportunidad de participar en una exposicion de material sobre el fenomeno OVNI que se llevo a cabo en el aeroclub de General Rodriguez (Pcia. de Buenos Aires), organizada por el Sr. Asdrubal Acosta y la Sra. Silvia Simondini y, su hija, Andrea.
El primer dia de la muestra, mientras me encontraba charlando animadamente con otro investigador, un señor se me acerco al descubrir que era yo el autor de una serie de materiales en exposicion relacionado al caso Bariloche. Esta persona me comento que un amigo suyo habia sido testigo del paso de un ovni para la misma fecha que los avistamientos del aeropuerto. Como este hecho resultaba de sumo interes para nuestra investigacion, le pedi los datos personales de su amigo para una futura entrevista.
– Mire, el es de Bariloche pero ahora esta en Buenos Aires. Si usted quiere, le puedo pedir que venga conmigo mañana para que lo conozca y le cuente a usted lo que vio –.
No estaba en mis planes concurrir a la exposicion la jornada siguiente, sin embargo ante la posibilidad que esta persona me ofrecia, no lo dude un segundo. De todos modos le pedi su telefono y quedamos en que lo llamaria por la noche para confirmar si su amigo podia presentarse en el aeroclub. Confirmada su presencia, por la mañana regrese a General Rodriguez junto a Carlos Vales.
El Sr. Martin Garcia (seudonimo), nuestro testigo, era de Bariloche pero por razones de salud, desde mediados de 1997, estaba viviendo en Buenos Aires cumpliendo con un delicado tratamiento medico. Gentilmente, Garcia, accedio a narrarme su experiencia ocurrida pocos dias antes del 31 de julio de 1995. Luego de ello, cuando abordamos el tema de las observaciones en el aeropuerto, me dijo que un amigo de Bariloche tenia en su poder una copia del audio de torre de control. Mi interes se duplico, y sin dejarle agregar otra frase le consulte:
– ¿No me diga que conoce a Jose…., Jose….?. Bueno ahora olvide su apellido –menti-.
– Jose Pereyra- me dijo seguro.
– ¿Aquel que trabajaba en xxxxxxxxx?- le volvia a preguntar a fin de confirmar que hablabamos de la misma persona.
Su respuesta afirmativa no me dejo dudas. Martin, sin saberlo, aportaba un dato muy valioso para nuestra busqueda (y no iba hacer la ultima vez en hacerlo).
Cuando le comente a Garcia que en mi ultimo viaje a Bariloche me informaron que Jose estaba viviendo en Buenos Aires, este se sorprendio pues era un dato que desconocia; desde su mudanza habia perdido todo contacto con el.
Agradeci a Martin Garcia por haberse acercado al aeroclub con el solo hecho de contarme su experiencia. Luego de ello nos despedimos.
Conociendo el apellido retome la busqueda de Jose… pero sin suerte, otra vez. Evidentemente por su residencia temporaria, no publicaba en las guias telefonicas. Tampoco logramos localizarlo en su presunto destino laboral ni en Bariloche. Otra vez opte por la misma formula que me habia dado resultado: tiempo + paciencia. Y fui nuevamente recompensado.
Una tarde de noviembre del año 2002, Francisco “Paco” Martinez, integrante de Gaceta OVNI y uno de los investigadores de campo mas activo del pais, me llamo a casa para trasmitirme un dato que, intuia, podia ser de nuestro interes. Paco me conto que luego de una conferencia brindada con el Grupo Hemisferio en la ciudad de San Justo, se le acerco un señor que se presento como Martin Garcia (casualmente era la misma persona que yo habia conocido en Gral. Rodriguez, aunque este dato Paco lo desconocia). Dicho señor le relato su avistamiento y le menciono tambien que un conocido (Jose) tenia una copia de la cinta de audio de la torre relacionado al caso Bariloche. Hasta ahi, no era una novedad. Pero cuando Paco le consulto como podia localizar a esa persona, Martin, sin mas, ¡le dio el numero de telefono de Jose! . ¿¡Que mas podiamos pedir!?
Ahora, y gracias a una nueva intervencion de Martin –quien evidentemente luego de nuestro encuentro en Gral. Rodriguez restablecio el contacto con su amigo en Buenos Aires- la tarea de ubicar a Jose era solo un tramite. Y en los dias posteriores lo llame.
Si no recuerdo mal, la primera vez que lo hice hable con su madre, a quien le deje mi nombre y le agradeci si podia trasmitirle mi mensaje.
Una vez que corte, y aun sabiendo que finalmente lo habia localizado, otros temores invadieron mis pensamientos. ¿ Conservaria, Jose, despues de tanto tiempo, la copia del audio?. Debia ser consciente que habian transcurrido 6 años –y un traslado de por medio- desde nuestra ultima, y unica, entrevista. Y aun asi ¿querria darme una copia?. Si me la nego en ese entonces, pensaba, ¿por que lo haria ahora?…solo el tiempo transcurrido jugaba a mi favor.
Evidentemente estaba librado a su buena voluntad, porque cualquier excusa de su parte echaba por tierra todas nuestras esperanzas en obtener la tan ansiada copia.
A los pocos dias, Jose me telefoneo a casa. Por suerte el me recordaba perfectamente, esto era un buen comienzo. Le explique –aunque seguramente lo imaginaba- el motivo de mi llamado, y le aclare que nuestro interes en la obtencion de ese material radicaba exclusivamente en lo que este podia aportar a la investigacion que veniamos realizando desde hace unos años del Caso Bariloche. Investigacion que habiamos comenzado a difundir mediante un informe preliminar publicado en internet en esta misma pagina. Luego de unos minutos de charla, me respondio que debia buscar en que cassette tenia grabado las conversaciones, pero estaba casi seguro de conservarlo. Durante la comunicacion menciono estar en contacto con Javier Stagnaro -otro investigador de Buenos Aires- tambien conocido por mi. Finalizamos la comunicacion con la promesa de que buscaria la cinta y me llamaria cuando tuviera una copia.
Pasaron dias, pasaron semanas, y no tenia noticias de Jose; por lo que reanude los llamados dejandole recados a sus padres o en el contestador automatico.
Tampoco respondio.
Sabiendo que Jose estaba con algunos problemas personales, opte por dejar pasar algunos dias mas y luego decidi comunicarme con Javier Stagnaro. A lo mejor por su intermedio tendria exito.
Javier efectivamente lo conocia. Cuando le comente a este el motivo de mi llamado, inmediatamente se presto muy gentilmente y con muy buena voluntad a contactar y convencer a Jose para facilitarnos una copia del audio. (La actitud de Javier Stagnaro, debe destacarse porque no abunda en demasia en el ambiente ufologico, por motivos varios). Deje todo en manos de mi colega e inicie otra paciente espera.
Fueron, tambien, varias las oportunidades que hable con Javier y no porque el no cumpliera con lo prometido sino porque Jose estaba muy atareado con otros asuntos y poco era el tiempo que tenia para mi pedido.
Finalmente, un dia de noviembre Javier Stagnaro me llamo a casa y me dio la gran noticia. Ya tenia la cinta de audio y el visto bueno de Jose para darme una copia. Le agradeci infinitamente por su intermediacion y le pedi que mi agradecimiento se lo haga extensivo a Jose.
El 5 de diciembre de 2003 la cinta ya estaba en nuestro poder
Referencias
(1) Al momento de la entrevista con Jose, ese material nos fue brindado por el ufologo barilochense Nestor Echarte; quien a su vez lo recibio –extraoficialmente- de manos de una persona del aeropuerto. El material era el siguiente: Transcripcion completa de las conversaciones de torre de control con los aviones. Los informes de la tripulacion del ARG-674, del meteorologo Nicolas Enoe Araya y del Sub. Principal Daniel A. Garcia, aunque este ultimo esta incompleto.
En agosto de 1997 recibimos del aeropuerto –luego de tramitar la solicitud a traves del Comando de
Regiones Aereas (Edif. Condor)- todos los informes. A los ya mencionados se agregaba el informe del
torrero Suboficial Ayudante Alfredo R. Blanco y el informe, completo, de Garcia.
Segunda Parte: La copia del audio. Contenido
A continuacion, vamos a exponer los resultados preliminares que arrojo nuestro analisis tras escuchar en numerosas oportunidades la cinta de audio.
Debemos aclarar primero que esta copia no corresponde a las comunicaciones completas que se llevaron a cabo esa noche. Comparandola con la transcripcion brindada por la Fuerza Aerea (“la transcripcion”) resulta elocuente que falta la primera y tambien la ultima parte de los dialogos. Sin embargo, los tramos mas importantes estan registrados.
Lamentablemente la calidad de la copia es mala; y ello, seguramente, a causa de la forma en que esta fue obtenida (de grabador a grabador; es decir, mientras un equipo reproducia el audio, Jose lo grababa acercando su aparato al parlante). De todas maneras, se logra escuchar gran parte de las conversaciones excepto por un tramo donde el audio es pesimo, y por momentos resulta inaudible. (Este tramo se inicia en el preciso momento en que, en la transcripcion, se hace mencion a una interrupcion).
La cinta de audio ademas de tener su importancia testimonial, resulto una valiosa ayuda para clarificar algunos puntos que, hasta al fecha, no estaban del todo claro. Permitiendo, tambien, conocer con mayor precision -y no tanto dependiendo de los testimonios que logicamente son susceptibles de errores- los tiempos de las conversaciones y por ende de los registros visuales del o los fenomenos. Pero, como muchas veces ocurre ante la aparicion de un nuevo elemento en la investigacion, otras inquietudes han surgido. Y estas seran tratadas en la tercera parte de este trabajo
La grabacion en nuestro poder (“la copia”) dura solo 14 minutos aproximadamente (aunque es relativo). Comienza con la frase “AL MOMENTO INICIA ALEJAMIENTO PARA CARTA NUMERO UNO PISTA DOS OCHO ARGENTINA SEIS SIETE CUATRO BARILOCHE.-, expresada por Dortona desde el ARG-674 y finaliza luego con el OK de torre de control como respuesta al aviso del GN-705 cuando dice: “RECIBIDO, A PARTIR DE ESTE MOMENTO ABANDONO UNO UNO CERO PARA UNO CERO CERO Y SIEMPRE EN ESPERA.- mientras sobrevolaba el lago con 11.000 pies y la aerolinea ya se encontraba en alejamiento (rumbo 120°), cumpliendo nuevamente el procedimiento para lo que seria el aterrizaje final.
Decimos que son catorce minutos relativos porque existe un tramo en que la cinta grabo a velocidad mas rapida, precisamente en la parte en que en la transcripcion de la Fuerza Aerea se hace la aclaracion “la cinta siguio corriendo cuatro minutos sin grabar y luego se detuvo…”. Esta parte es confusa y se analizara mas adelante. Lo cierto es que, si este tramo de cinta se escucha a velocidad normal, la duracion total de lo grabado se aproxima entonces a los 15 minutos.
Teniendo como referencia la transcripcion, vamos a dividir la copia en tres partes (A, B y C) para que resulte mas claro la exposicion de los resultados del analisis.
Identificamos como:
parte A al tramo que se extiende desde el inicio de la copia, que corresponde al momento que el ARG-674 comienza el procedimiento hasta que realiza el escape.
parte B al tramo “en blanco”, es decir donde supuestamente –segun la transcripcion- deberia haber cuatro minutos de silencio pero algo se escucha en la copia.
parte C a partir del momento en que se restablece la grabacion (coincidiendo con la transcripcion) hasta el OK de la torre luego de la frase del GN-705: “RECIBIDO, A PARTIR DE ESTE MOMENTO ABANDONO UNO UNO CERO PARA UNO CERO CERO Y SIEMPRE EN ESPERA”, con la que finaliza la copia.
Parte A.
Tenemos la plena seguridad que esta parte fue copiada sin interrupciones, respetando los tiempos reales del audio de la Torre de Control. Su duracion es de 9 minutos 40 segundos aproximadamente.
Los tiempos que se señalan a continuacion (en minutos y segundos) se calcularon a partir del momento que se escucha al ARG 674 comunicar el inicio del procedimiento; esta primera etapa comprende las siguientes maniobras: El boeing 727-200 bloquea la radiayuda (VOR, vertical del aeropuerto) y comienza un alejamiento con rumbo 120° (sudeste) hasta 13 millas DME, en descenso, desde una altura de 10.000 pies (3.000 m.) hasta 6.400 pies (1920 m.).
Entonces, a partir del abandono de la vertical y siempre desde la perspectiva de la tripulacion del ARG 674, transcurren:
– 2m 07 seg. cuando descubren una luz intensa, al frente (S.E), y consultan a la torre si tiene un “transito” reportado;
– 2m 25 seg. anuncian que estan a 7 millas, 7 millas y 1/2 y con “transito” a la vista;
– 2m 35 seg. al momento en que el copiloto Carlos Dortona dice:- “ahi esta, a las once”-, y luego hace mencion a un cambio de rumbo del “transito”.
– 4m 58 seg. a 15 millas anuncian el inicio del “viraje de procedimiento” –realizan un giro a la izquierda- momento en el cual pierden de vista la luz por la inclinacion del avion.
Durante esta etapa (alejamiento) la luz o “transito” fue observado durante tres minutos.
Luego del viraje el ARG-674 se ubica “en final” –rumbo 284ª-, esto es, inicia el ultimo descenso desde 6.400 pies hasta tocar pista. (Los tiempos continuan calculandose desde el inicio del procedimiento)
– 7m. 48 seg. a 11 millas (en aproximacion), con un “transito” que los esta formando.
– 8m. 10 seg. a 10 millas y en igual situacion..
– 9m. 10 seg. Cuando interviene el Comandante Jorge Polanco confirmando tener “ un objeto a la derecha y en formacion” pasando a describirlo someramente, observando al torrero que a mayor altura veian a la aeronave de Gendarmeria que este mencionaba. Finalizando con la frase “no se, creemos que es un plato volador”, expresada por Polanco.
– 9m. 38 seg. cuando la grabacion cambia de velocidad (parte B).
– 9m 55 seg. anuncian que hacen el escape (considerando un dialogo de la parte B).
En esta etapa final, la configuracion de tres luces (o el objeto con tres luces -como lo describe la tripulacion-) estuvo volando “en formacion” junto al avion durante, al menos, dos minutos.
PARTE B
En la transcripcion de la Fuerza Aerea se puede leer la siguiente aclaracion: “Interrupcion de grabacion. La cinta siguio corriendo unos cuatro minutos sin grabar, luego se detuvo volviendo a grabar cuando se restablece la energia”.
Cuando escuchamos por primera vez esta parte del audio esperabamos encontrarnos con un prolongado silencio; sin embargo, despues del pedido de atencion que hace la Torre de Control (Bar TWR) al GN-705 se percibe que la grabacion se acelera y a continuacion se inicia un dialogo, tambien a velocidad rapida. Al escuchar la cinta nuevamente pero a velocidad normal, descubrimos que son conversaciones que no figuraban en la transcripcion.
Desgraciadamente, el audio de este tramo es pesimo y resulta practicamente inaudible en su totalidad. Lo que sigue es lo poco que se puede rescatar:
ARG 674 : (Presumiblemente habla Polanco) ¿Se corto la luz?.
BAR TWR: Afirmativo, afirmativo….(inaudible)
…(inaudible)
ARG 674: …hago escape…haciendo escape (inaudible).
BAR TWR: …(inaudible)…(Aparentemente da instrucciones sobre el escape).
…(inaudible)
BAR TWR?: …(inaudible)…uno uno cero y a la vertical de Bariloche…
(Inaudible).
Tal cual esta en la copia, respetando el cambio de velocidad señalado, la duracion de estas conversaciones es de 1 minuto 05 segundos. Ahora bien, si se escucha a velocidad normal, se extiende a 1 minuto 30 segundos.
Luego la copia continua (aunque seguramente hubo un corte de por medio) a velocidad normal a partir del aviso de Bar TWR comunicandole a la aerolinea: “ …confirma inicia procedimiento, entiendo esta en acercamiento…” (Parte C), es decir, cuando el ARG-674 estaba aproximandose a la vertical del aeropuerto para reiniciar el procedimiento de aproximacion, previo al aterrizaje final.
La cuestion del cambio de velocidad en la cinta (copia) comienza, aparentemente, en el momento en que se produce la caida del equipo electrogeno del aeropuerto pero no podemos asegurar que esta aceleracion tambien ocurra en la grabacion original de la torre. Bien pudo ser una falla del grabador de Jose o a lo mejor este sin darse cuenta pudo cambiar la velocidad de grabacion de su aparato mientras hacia el duplicado. (Hasta el momento no pudimos volver a dar con el para evacuar estas inquietudes. El tiempo transcurrido esta vez no juega a nuestro favor). En la tercera parte de este trabajo volveremos al respecto.
PARTE C
Esta parte, que dura 3 minutos 20 segundos, se inicia cuando el ARG-674 estaba aproximandose a la vertical del aeropuerto para reiniciar el procedimiento luego de la maniobra de escape y viraje sobre el lago. El avion de Gendarmeria se acercaba al lago, en rumbo convergente al ARG-674.
BAR TWR: Seis siete cuatro confirma inicia procedimiento, entiendo esta en acercamiento seis siete cuatro, abandona carta uno para pista dos ocho, restablecida la luz.-
ARG 674 : Copiado, abandonamos para carta uno dos ocho el seis siete cuatro.-
BAR TWR: Informa liberando cien, acabamos de ver la luz otra vez.-
ARG-674 : Nosotros en este momento estamos viendo el transito que esta con ciento diez (se refiere al avion GN-705), pero la luz no la tengo yo a la vista.-
BAR TWR :Bueno, listo estaba detras suyo.-
Fueron 25 segundos de dialogo, luego hubo un silencio de 2 minutos.
En este intercambio, la torre le hace saber a la tripulacion del ARG-674 que habian visto la luz (segun la descripcion del torrero, ellos comienzan a observar una luz arriba de la cola del avion cuando este se encontraba en pleno escape sobrevolando la ciudad y la pierden de vista (en realidad pierden de vista a ambos) cuando el avion inicia el viraje sobre el lago, por la nubosidad existente en esa zona). Desde el ARG-674 responden que no ven la luz pero si en cambio aprecian al avion de Gendarmeria con “rumbo 110”, es decir sudeste.
Esta instancia del procedimiento sera analizada tambien en la tercera parte de este trabajo porque algunas cosas no estan muy claras.
Luego de esos 2 minutos de silencio, hay otro intercambio de torre con el ARG-674 que dura 55 segundos y el audio en nuestro poder finaliza luego del OK del la torre al aviso del GN-705 que abandonaba los 11.000 pies para 10.000 pies “y siempre en espera”.
Las conversaciones continuaron, como se puede ver en la transcripcion, hasta que los aviones aterrizaron. Pero no hubo nuevas referencias a la presencia de los fenomenos
Referencias de los investigadores
Oscar A. Uriondo. Nacio el 12 de mayo de 1929 en Buenos Aires, es graduado en Geografia y Bibliotecologia. Comenzo su interes en el Fenomeno OVNI en 1959. Es autor de los siguientes libros: “Bibliografia geografica referente a la Republica Argentina” (1962), “Objetos Aereos No Identificados: Un enigma actual” (1965), “El problema cientifico de los OVNI” (1968), “Los aterrizajes de OVNI en la Argentina” (1972). Ademas ha escrito una decena de folletos y alrededor de 70 articulos en revistas y boletines especializados (12 de ellos en publicaciones extranjeras: España, Francia, Reino Unido, Suiza). Fue co-director del CEFAI, director del CEU, miembro colaborador de OVNI: UN DESAFIO A LA CIENCIA (CADIU) y de STENDEK-CEI. Actualmente es columnista de GACETA OVNI y miembro de la Red Argentina de Ovnilogia (RAO). Vive en Buenos Aires (Argentina). Su direccion electronica es oscaruriondo@hotmail.com
Juan Pablo Gomez. Nacio el 16 de abril de 1972 en Buenos Aires, se inicio en la investigacion activa del Fenomeno OVNI a partir del año 1990, luego de finalizar sus estudios secundarios. Fue Sub-director del Centro de Estudios de Fenomenos Ufologicos (CEFU) durante tres años (1993 – 1996). Ha colaborado en varias oportunidades con revistas y boletines ufologicos de la Argentina. En la actualidad es investigador independiente. Integra el staff de GACETA OVNI y es miembro, desde 1993, de la Red Argentina de Ovnilogia (RAO). Vive en Lanus (Bs.As.-Argentina). Su direccion electronica es morkolson@yahoo.com.ar
(1) Entendemos por OVNI “ a la percepcion informada de un objeto o luz vistos en el cielo o sobre el suelo, cuya apariencia, trayectoria y comportamiento luminico y dinamico general no sugieren una explicacion convencional logica y que no solo resultan desconcertante para los percipientes originales, sino tambien para aquellas personas tecnicamente capaces de encontrar una identificacion correcta, en el caso que la hubiera”, tal cual lo definio oportunamente el Dr. Joseph Allen Hynek. Con ello no suscribimos ninguna de las hipotesis que se han esgrimido hasta la fecha. Menos aun, aceptamos la asociacion en la que se pretende identificar al OVNI como nave de origen extraterrestre.
(2) En 1995 no hubo un incremento repentino de la actividad OVNI sino un marcado aumento en la difusion periodistica de las denuncias. Basta echar un vistazo a la casuistica de la Red Argentina de Ovnilogia (RAO) para observar que la oleada se inicio en 1994, año en el que se registraron mas de un centenar de denuncias solo en el territorio nacional; y la prensa poco y nada informo al respecto.
Uno de los diarios que mayor provecho saco a la “fiebre” ovni de 1995 fue Cronica, que comenzo a
publicar en sus ediciones vespertinas –primero diariamente y luego semanalmente- una seccion exclusiva
sobre los “platos voladores”.
En otra oportunidad hablaremos sobre la cobertura periodistica que tuvo el caso; tanto en cantidad como
en calidad informativa. Los resultados que el analisis arrojo son muy interesantes.
(3) Si bien la filmacion de la “autopsia a un ET” tuvo una importante repercusion en la opinion publica–y no era para menos porque fue precedida por una campaña publicitaria a escala mundial- paso sin pena ni gloria y rapidamente se transformo en una anecdota. Sin embargo, el caso Bariloche produjo un impacto tal que muchas personas que poco o ningun credito daban a los testimonios sobre el Fenomeno OVNI cambiaron de parecer.
(4) Toda persona que tenga informacion sobre el caso que nos ocupa y quiere ofrecer su testimonio puede escribir a la direccion de los autores o bien a elcasobariloche@yahoo.com.ar