VICTORIA, ENTRE RIOS: CASO EN EL HOGAR SAN MARTIN (13 AGO 1991)


Las noticias se precipitaron rapidamente. A partir de la filmacion de un fenomeno luminoso en la estancia La Pepita, cercana a la Laguna del Pescado, el 23 de julio de 1991 -aunque precedida por una observacion el jueves 18-, Victoria paso a ser centro de una larga serie de acontecimientos ufologicos. Entre estos, numerosisimos avistamientos de luces sobre el rio y en pleno campo, nuevos registros filmicos y fotograficos, la caleidoscopica visita de especialistas y conferencistas, la supuesta llegada de investigadores de la NASA, y una hoteleria abarrotada por curiosos platillistas.

Bajo la animacion del periodista local y martillero publico Ramon Pereyra, esta localidad de 30.000 habitantes situada al sudoeste de la provincia de Entre Rios, cambio su historia. Salio de su letargo de vida apacible y pueblina, para acoger alegremente a un turismo que -para los mas entusiastas- transpuso las fronteras de nuestro planeta.

Mas aca, Victoria canto victoria. Sin llegar a salir de su asombro y como espectaculo adicional, recibio a la alborotada masa de gente capaz de decir: “¡Existe!”. Si, Victoria existe.

Despues de aquellos sucesos nada fue igual… La parrillita de la costanera, el licor del monasterio, se ofrecieron generosos al mundo. El clima era estimulante. La propension a ver, a no permanecer en el anonimato habia sido cultivada.

Tampoco estuvo ausente la nostalgica politica del silencio. No falto quien habiendo creido que contribuiria a apaciguar -quiza- la ola de rumores, con inigualable torpeza declaro que el tema Victoria “es secreto de Estado”.

Algun tiempo atras, pero en medio de la voragine, un interno y tres celadores del “Hogar General San Martin”, ubicado a escasos kilometros de Victoria -en la ruta 11, que la une con Gualeguay-, aseguraron haber observado dos extraños seres, o parte de ellos, que “parecian flotar en el aire”, junto a un circulo de luz que bajo en la carretera.

Ello ocurrio el martes 13 de agosto de 1991, alrededor de las 22 horas, y fueron testigos: Roberto Perez (interno del Hogar, con estudios primarios, nacido el 20 de octubre de 1970), y los celadores Miguel angel Dionisio (con estudios secundarios, nacido el 20 de febrero de 1950), Fidel Rene (con estudios primarios, nacido el 23 de marzo de 1934), y Carlos Gabirondo (fallecido a poco de producirse el episodio)


El periodista Ramon Pereyra, el gran animador de los fenomenos de Victoria.

La investigacion se inicio un mes y medio despues, extendiendose hasta finales de 1992. Debido a que se trata de varios testimonios, por veces contradictorios, hemos procedido para un mejor ordenamiento y comprension, a exponerlos en forma separada y ensayar un analisis y comentario, iniciando este informe con un trozo de la entrevista mantenida con el citado periodista Ramon Pereyra, personaje clave de cuanto ocurre con los ovnis en Victoria.

He aqui su testimonio:

“Del tema de los platos voladores aca en Victoria el responsable soy yo: no soy el productor, pero si el responsable. He tenido que soportar meses de constantes agravios de los colegas de otros medios, que me han calificado como perseguidor de la popularidad, de querer ganar dinero facil. Lo que queremos es que aquellos que llegan buscando una respuesta a este interrogante, puedan llevarse elementos que sirvan de testimonio. Soy el responsable en el sentido figurado, porque los ovnis, aqui en Victoria, tienen su asentamiento desde hace muchos años. En 1985 ya teniamos experiencias…

“Los que no creen en los ovnis ya no me tildan de loco, porque son tantos los que han tenido experiencias, que se sienten apabullados; cada uno que va teniendo una experiencia me informa como si yo fuera la caja de resonancia de este tema, y no es asi, no soy el propietario, simplemente he sido y soy un difusor de este fenomeno.

“Yo puedo dejarlo documentado, no quiero que se me califique como un Cristobal Colon. Hay una distancia sideral entre Cristobal Colon y Ramon Pereyra, pero yo puedo firmar un documento y el tiempo dira: No se exactamente cuando, pero en Victoria se va a producir un acontecimiento que va a sacudir a la humanidad. Hace 40 dias, en el Hogar General San Martin se produjo otro avistamiento. Faltando 5 minutos para terminar el informativo que estoy haciendo por television todas las noches, suena el telefono del canal y alguien me dice: “Ramon, largate para aca, estoy mirando el asentamiento de un plato volador a 300 m del Hogar de jovenes”, pero ¡que vamos a ir!; nos iba a insumir un tiempo considerable, y por eso desistimos. El celador corta la comunicacion, el resto de la comunidad habia salido del exterior de la vivienda para acercarse al aparato; del mismo salio un ser extraterrestre.

“Aca en Victoria no estamos viendo luces, nosotros hace rato que dejamos de creer en las luces malas. No son luces, aqui hay cuerpos que emiten luces, que estan descendiendo. No nos sentimos molestos, pero si queremos un acercamiento con ellos.

“En este momento en la ciudad de Victoria manejo un informativo que va todas las noches, de lunes a viernes. Por el canal local, en la radio LT-39, realizo programas musicales desde hace ocho años. Esto puede provocar un poco de confusion en el oyente, en el televidente, es decir, en el consumidor de lo que hago, considerando que Ramon Pereyra esta desarrollando dos facetas. Sin embargo hay algo fundamental que unifica la personalidad de Ramon Pereyra, y es la credibilidad: Yo siempre voy con la verdad”, concluye diciendo.

Ramon Pereyra nos recibio poniendo de manifiesto un buen manejo de la expresion verbal, utilizando un lenguaje adornado. Su caracteristica es egocentrica y seductora.

Es evidente que el boom de los ovnis existe en Victoria, pero si asi se sostiene, pareciera estarlo porque este periodista lo propicia, aprovechando los medios de comunicacion de los que dispone, y el asenso que posee en sus seguidores locales.

A pesar de que desde su discurso aparezca negado, se siente la caja de resonancia de los fenomenos que alli se producen: de el parte y a el llega la informacion, manteniendo en vilo y expectante al publico.

Diriamos que sosteniendo el interes en los ovnis, se sostiene el interes por su persona.

EL TESTIMONIO DE ROBERTO PeREZ (interno del Hogar, 21 años)

“El martes 13 de agosto de 1991 a las 22 horas, estabamos tomando mate (una infusion de hojas de mate, planta americana) antes de cenar; fuimos a la cocina, y mientras esperabamos que se hiciera la comida sali para ver si venian unos compañeros. Se me ocurre mirar para el lado de los eucaliptos y veo dos luces de color, primero aparece una y despues la otra, subian y bajaban, despues hicieron como un triangulo. Eran amarilla y roja. Despues, una sola luz se deslizo hasta el medio de la ruta, y en esa ubicacion -frente a la entrada del Hogar- descienden dos sombras negras, no se apoyaban en el asfalto, sin tocarlo caminaban por encima del piso, avanzaban y se cruzaban. La luz tan fuerte me permitia ver las sombras de dos hombres normales: Entonces, veia la sombra de dos hombres con la luz de color amarillo muy fuerte, la de color rojo ya no se veia. Todo esto a 300 metros, aproximadamente. De repente, se apago la luz, pude observar una especie de olla, el color era blancuzco


Roberto Perez, el joven interno del Hogar

“Estoy un poco aburrido, cuando me paso esto me puse contento, algunos compañeros trataron de acercarse a partir de esta experiencia, pero se reian; al principio nadie me creia, despues me preguntaban pero se reian. Ya estoy cansado de hablar, pienso que me toman a la chacota… me invitaron a hablar en el cine, por la radio… pero la gente se rie. El periodismo ya me canso tambien. A mi me gusta ir a pescar todos los dias, mirar television, trabajar, y estar en mi casa que es el Hogar. Pronto me tengo que ir de aca, espero encontrar un buen lugar, un buen trabajo y hacer mi vida solo.

“A los hombres les veia el cuerpo completo, la cabeza era rara, diferente a la de los seres humanos, era medio levantada hacia arriba, en esas figuras de color negro lo unico que no llegue a visualizar fueron sus manos.

“El aspecto de estos seres no me parecio agresivo ni malo, creo que si lo fueran no estariamos en la Tierra, nos hubieran hecho desaparecer. Supongo que vienen de otro lugar, no se cual: yo lei en un libro que vienen a cargar energia del agua.

“Yo los vi esa unica vez, pero dicen que aca en Victoria aparecen todos los dias, especialmente en la Laguna del Pescado.

“Ante esa aparicion, sali corriendo para la cocina y de ahi hacia la sala de recepcion. Al principio todos nos quedamos bien quietos, tiesos, pero despues nos sobrepusimos al impacto, y junto con Gabirondo, avanzamos unos 100 m y desde esa distancia, continuamos observando. La observacion en el frente del Hogar sobre la ruta, se extendio por espacio de unos minutos. Repito: cuando la luz roja llego a esa ubicacion, ascendio y no se la vio mas, en cambio, la luz amarilla se apago. En el interin, paso un camion por la ruta, cuando vio el ovni freno, pero enseguida volvio a marchar


Roberto Perez, explica al doctor Banchs la forma en que se movio la luz roja.

“No tuve miedo -yo no le tengo miedo a nada- senti un gran asombro. Esa noche, el cielo estaba oscuro y estrellado, no vi la Luna, no habia viento, estaba lindo.

“Yo aca en el Hogar no tengo amigos, son todos ladrones… en realidad, tampoco los tengo fuera. Soy un solitario, pero yo me siento bien solo. Con excepcion de los celadores y el director, no hablo con nadie. Hago artesanias que vendo y por la mañana trabajo en la verduleria. No tengo familia; a mi abuelo hace cinco años que no le veo, se que vive en Parana, pero no conozco el domicilio”.

[1] Este articulo fue publicado originalmente en Los Identificados. Casuistica ovni con ocupantes en Argentina, N° III, Buenos Aires, julio de 1993, paginas 7-16.

EL TESTIMONIO DE MIGUEL aNGEL DIONISIO (Secretario economico del Hogar, 41 años)

“El martes 13 de agosto a las 9:55 horas estabamos por tomar unos mates, cuando el señor Rene sale de la cocina del establecimiento y dice: “Venga, estos si que deben ser los ovnis”. Salgo corriendo y observo un juego de dos luces que cruzaban en circulo, bajaba una y subia la otra; lo vimos durante tres minutos mas o menos. En eso aparece Gabirondo y enseguida Perez. Gabirondo corre a llamar por telefono a Ramon Pereyra del video-cable de Victoria. Observamos que una de las luces emerge otra vez, pero mas cerca de nosotros, desde esa posicion, corrimos hacia el frente del establecimiento y en el interin, paso un camion por la ruta, estaba cargado, iba por la cuesta, yo digo: ‘No vaya a ser que se le aparezca el ovni’; zafa el camion, y al llegar al frente del establecimiento, la luz baja al borde del asfalto al costado de la ruta. Es una luz muy fuerte blanca, y observamos como dos pares de piernas que dan pasos, pero en estado de gravedad. Gabirondo -que estaba hablando por telefono- me dice: “Flaco, ¿vos ves lo que yo estoy viendo?”, tira el tubo telefonico y sale corriendo hacia donde estaba la luz, pero no llego, porque en menos de un minuto desaparecio. El telefono esta en el ventanal sobre el frente, el vio cuando aparecio la luz alli y fue, pero la luz instantaneamente se apago sin elevarse, antes hizo un pequeño giro. Yo vi las piernas, es decir, la parte inferior del cuerpo, de la cintura para abajo, a una distancia de 350 m. Las veo al borde de la luz, pegadas a la luz por delante, como una sombra; las figuras se ven oscuras, la luz fuerte es blanca y noto el borde coloreado de amarillento y rojizo, el juego de luces se ve muy lejos, ese objeto con las figuras lo vemos a 350 m mas o menos. Desde que la luz baja y se observan las figuras, pasa alrededor de un minuto. Desde el inicio hasta el final del avistamiento habran transcurrido 4 minutos


Miguel angel Dionisio, secretario economico del Hogar Gral. San Martin.

“La luz es local, abarca unos 20 m y no se proyecta. En el borde estan esas figuras que dan pasos en estado de gravedad, la luz esta como suspendida sin tocar el suelo, las piernas -que son talla normal- las veo de color marron, observo el movimiento de caminar, aparentemente eran como de hombre. La luz hace un giro en semicirculo y desaparece, hace un arco desde abajo, se eleva alrededor de 2.000 m y vuelve a bajar, luego se apaga, no irradia ni encandila. Las cuatro piernas forman dos pares que se mueven como dando un pequeño paso. Eso lo observe durante 50 segundos, mas 10 segundos de la vuelta en giro, completan el espacio del minuto total. No era la luz del faro de un auto porque hubiera proyectado, y esta era local.

“En el establecimiento reinaba un silencio normal. No detectamos ningun cambio, ni en los perros del lugar ni meteorologicos. Era una noche serena, sin viento, habia Luna chiquita. No registramos olores ni marcas. Gabirondo, con dos chicos del Hogar, fueron con la linterna a inspeccionar, pero no observaron nada particular; al otro dia, con la claridad, volvimos a revisar y tampoco detectamos nada.

“Gabirondo, quien lamentablemente murio hace unas semanas a los 40 años, dijo haber visto dos piernas de dos personas, por lo tanto eran dos pares que aparecian juntos; el observo que caminaban muy lentamente como dando pasos. el estaba ubicado derecho a la puerta misma del establecimiento, hablando por telefono, y desde ahi ve cuando baja la luz, me grita, y luego manifesto haberme visto como petrificado.

“el era el que estaba mas interesado en el tema de los ovnis, leia, siempre buscaba revistas con informacion; el manejaba un taxi y se desplazaba por la ciudad, conversaba con uno y otro en la zona del balneario sobre lo que acontecia con el fenomeno


Vista desde el camino de acceso al edificio del Hogar Gral. San Martin hacia la ruta n° 11.

“El chico Perez declaro haber visto seres de cuerpo entero. Yo le pregunte si estaba seguro, porque los cuatro (Gabirondo, Rene, el y yo) estuvimos comentando esta experiencia durante toda la noche. Al principio el parecio no reaccionar, creo que tomo conciencia cuando lo empezaron a interrogar. Yo hable con Roberto: ‘¿Estas seguro que lo viste completo?, aca no se trata de mentir’. “Yo si -dice-, yo los vi enteros”. Le pedi que no invente, que contara lo que realmente vio, entonces me confeso que la verdad era que no los habia visto enteros. Pero cuando vino el periodista, relato haber observado cuerpos completos… Ese 13 de agosto, a esa hora, el habia ido a la cocina para calentar agua para el mate. En el Hogar despues de cenar, juegan a las cartas, miran television o van a la pieza a tomara mate… pareciera que este chico Perez busca deformar… ahi dentro empezaron: “che, vino ‘fulano’ de tal revista, vino ‘mengano’ de la television, ¿vas a trabajar gratis?”. Es un pibe con problemas -todos en el Hogar tienen problemas, vienen con dramas familiares-, Perez ha vivido practicamente toda la vida en el Hogar. Hoy tiene 21 años, la madre lo dejo cuando tenia 2 años, los padres son separados, los dos borrachos. el es bueno, a veces tiene reacciones despectivas, es impulsivo. Para el estudio no tiene mucha capacidad, es poco imaginativo, solo termino la escuela primaria; los compañeros lo quieren y aceptan. Ahora le llega el momento de irse[1], sin embargo no ha tomado al respecto ninguna iniciativa.

“Don Rene es sereno, el tambien dice haber observado miembros inferiores de talla normal y no cuerpos completos. Segun lo conversado, el no noto el giro en semicirculo que yo observe, para Rene la luz se apago directamente.

“El dia anterior al avistamiento de este fenomeno, mi hija me habia pedido que la llevara para ver los ovnis, y en esa ocasion le dije: ‘Tengo que verlo para creerlo’, no la lleve. Al otro dia ella no se encontraba aca, estaba en Rosario con el resto de la familia, a los cuatro dias viaje y al verlos dije: ‘¡He sido el furor!’. En la radio de Rosario se informaba sobre lo que habiamos visto aca, mi hija no me creia, yo le dije: ‘Cuando llegues vas a leer los diarios’. Hace quince dias con mi hija, mi señora y una vecina vimos unas luces, entonces yo les dije: ‘Ahi estan los ovnis’, aparecieron a la altura de la abadia, era un luz muy fuerte, muy blanca con los bordes rojizos, se desplazaba lentamente, y lentamente tambien se apago.

“El episodio en el Hogar de jovenes General San Martin, fue una experiencia que jamas crei vivir, fue algo inesperado, a pesar que siempre afirmaba ‘tengo que verlo para creerlo’; el tema sobre ovnis no me ha interesado nunca, alguna vez lei algo, pero someramente.


Vista del acceso al Hogar, en la interseccion del camino y la ruta 11.

“Ante este fenomeno senti asombro, no senti miedo porque estabamos preparados mentalmente: observabamos la luz que venia, no senti miedo porque no me enfrente de golpe. Senti admiracion -especialmente- cuando vi las figuras que daban pasos, o hacian ese movimiento de pasos sin avanzar.

“Durante varios dias me senti contento porque venian los amigos para que les contara, me llamo el Intendente para averiguar por telefono; hace una semana lo encontre en un asado, me pidio que nos sentaramos juntos y le narrara lo sucedido personalmente, estaba tambien el director del Hogar.

“Fue una experiencia que me gustaria repetir para ver si tengo la oportunidad de observar detenidamente a la figura, me quedo grabada, quisiera ver si puedo observar la parte que no vi, confirmar si eran similares a las personas… yo vi piernas, pero no creo que sean solamente piernas que se deslizan. Lo que yo quiero saber es si existen estos seres, estas figuras que vi ¿son extraterrestres?, ¿no lo son?, ¿sera algo que envian los norteamericanos, los rusos? Ellos estan muy adelantados…, pero que pueden querer aca, ¿buscaran algo especifico para estudiar?, ¿alguna riqueza?, ¿que fin persiguen? Yo deseo que se sepa la verdad, deseo hacer un aporte a aquellos que se interesan, que estudian con seriedad. A todos los que vienen yo los atiendo, pero quiero dar con la persona que me de una explicacion, que me diga que hay de cierto en todo esto”.

EL TESTIMONIO DE FIDEL RENe (Celador-sereno, 58 años)

“La noche del martes 13 de agosto a las 22 horas estabamos como de costumbre, despues de la cena, en el Hogar; salgo de la cocina y veo a 300 metros dos luces que estaban como jugando, haciendo zig-zag. Llame a mis compañeros de servicio, salieron a ver y vieron; uno de ellos -que ya murio[2]- fue a telefonear a video-cable para informar lo que estaba sucediendo, en ese momento -rapidamente- las luces se corrieron y se detuvieron frente a la entrada del establecimiento sobre la ruta, pero lo hizo una sola luz muy brillante: se poso en el asfalto, se vio por escasos tres o cuatro segundos.

“La luz era muy fuerte pero natural, como un reflector fuerte que brilla, iluminaba las ramas y las plantas, proyectaba alumbrando a unos 30 metros, cuando se poso se veia el vislumbre. No era la luz de un vehiculo ni la de un cazador porque es opaca, tampoco la de un reflector, porque este larga como un chorro de luz en forma de cono, no eran luces de aviones. Esta luz fuerte y brillante, de pronto, se apago


Otra vista del acceso al Hogar. Alli se habria ubicado el ovni.

“Vi dos personas: Observe la parte inferior del cuerpo, de la cintura para abajo; la parte superior estaba a oscuras. Se visualizaban dos pares de piernas, no pude distinguir el color; sin embargo, se notaba que eran de personas normales -no eran enanos como se dijo-, la talla era normal. A la distancia se notaba que caminaban, el movimiento de esas piernas mi hizo pensar en la de los hombres, ademas se veian en pantalones comunes, no estaban desnudos. Cuando vi eso dije: ‘Ahi bajan dos personas’. Yo no observe ningun objeto, ni nave, ni aparato, solo esa luz fuerte y las piernas de dos personas que avanzaban juntas, haciendo un circulo muy cortito. La observacion no fue muy clara ya que estaba oscuro, el vislumbre iluminaba la zona inferior, ahi se clavo, no obstante me parecio que estaban pisando.

“No estaba nublado, no habia Luna, no se detecto marca alguna ni cambios de ninguna indole.

“Conmigo estaba Gabirondo, Dionisio y el chico Perez, ellos estaban petrificados, no decian palabra, estaban duros, en verdad, ninguno de nosotros atinaba a moverse. Ellos estaban sorprendidos… a mi no me tomo de sorpresa… no me acerque porque no me llamo la atencion… aunque puede parecer raro, en ese momento no pense que fuera algo extraño, me parecio algo natural. Siempre he estado viendo luces, objetos que han cruzado el cielo y que no eran aviones, esto es comun aca en Victoria, especialmente desde el mes julio ultimo se escucha hablar de ovnis continuamente. Supongo que estos seres nos vendran a observar.

“Para mi, este fenomeno es una señal, como una profecia; lo digo siempre: En la Biblia esta escrito, dice que el mundo terminara -no se sabe cuando- pero habra un fin. En el Nuevo testamento, dice la palabra de Dios, que en los ultimos tiempos habra señales, confusion. Estas son cosas que tienen que suceder, todo esto que ocurre en la Tierra esta escrito, lo mismo que el anuncio de la maldad que aumenta y se multiplica. El Señor Jesucristo dijo que debiamos estar preparados para cuando estas cosas comenzaran a suceder, hambre, sufrimiento y dolor. Por eso para mi la vivencia de este episodio fue algo natural, que tiene que pasar y lo recibo con paz, no me asombra, porque es como aquel que ya esta avisado de algo y cuando llega, no hay sorpresa por que lo sabia.

“La semana pasada estaba en la casa de una vecina, y tambien vi una luz que se movia, me puse a mirarla: subia, bajaba, se apagaba, se ponia roja y se le veia dos antenas; esto ultimo me llamo la atencion, eso nunca lo habia visto; estuve mirando un rato y desaparecio. Eso no se lo conte a nadie.

“Yo no soy una persona que le guste hablar mucho; la semana pasada vinieron de un canal para grabar, lo iban a enviar a los Estados Unidos, pero lo interprete como un negocio, y yo no me presto a eso. A mi me gusta ir con la verdad”


Rene Fidel, celador-sereno y testigo del suceso ocurrido el 13 de agosto de 1991.

[1] Luego de las dos entrevistas mantenidas con R. Perez, y a nuestro regreso, nos telefoneo en varias oportunidades a Buenos Aires. Tiempo despues, M. Dionisio nos comento que habia ido a vivir con su abuelo a Parana. En agosto de 1992 nos escribio otro interno, Marcos Benitez, diciendo: “Fui amigo de Roberto, yo les escribo para contarles que a el le llego el egreso y que se tuvo que ir a su casa, ademas el era desertor del servicio militar desde hace dos años”.

[2] Informa F. Rene que Carlos Gabirondo fallecio luego de una intervencion quirurgica a la que fue sometido para extraerle un organo que habia donado a su hermano. Como era de esperar, no faltaron quienes pretendieron atribuir inescrupulosamente como causa del deceso la presencia del ovni.

ANaLISIS DE LAS ENTREVISTAS

El encuentro con el joven Roberto Perez no fue facil. El contexto lo presentaba de personalidad dificil, vive en el Hogar General San martin desde pequeño. Siendo el principal protagonista de esta experiencia (“el que mas vio”, segun los dichos de otros testigos) afirma que se siente manipulado por la prensa, investigadores y curiosos que, en busca de informacion, se acercan al lugar y a el en especial.

La noche en que se avisto el fenomeno relatado, Roberto se hallaba junto con los celadores. Ellos lo describen como un muchacho parco, con dificultades para hacer amistades, que gran parte del tiempo en el establecimiento. Tampoco parece afecto al estudio. el mismo se describe como un solitario; su unica diversion consiste en ir a pescar a la laguna, o al rio, en compañia de su perra. Interrumpiendo el dialogo, Roberto se aproximo a Fidel Rene y en forma hostil expreso a viva voz: “Yo no hablo mas”. De esta manera lo conocimos, dandonos a entender que -en apariencia- era alguien “de pocas palabras”, querellante y agresivo, cuya intencion era intimidarnos.

Luego de que Rene intercediera, accedio a la entrevista: al principio se mostro serio y hosco, siendo necesario poner en juego cierto grado de habilidad a fin de disolver la tension que, por momentos, se tornaba en monologo, con pesados silencios.

Roberto Perez desconocia el dia del cumpleaños (recabamos este dato por la intermediacion del director de la institucion), no tiene familia: abandonado por su madre -de quien nada supo ni sabe, como asi tampoco de su padre- solo se vinculaba con un abuelo, a quien no ve desde hace cinco años.

Obviamente, su vida se reduce al ambito del Hogar, y a los acontecimientos que alli se producen. Tambien en ese lugar permanece los fines de semana, sin compartir salidas con sus compañeros. Entre mateadas en soledad, algun rato mirando la television o quedandose en su dormitorio junto a su perra, transcurre el tiempo para este joven, en medio de la catadura de un pueblo, cuyas largas horas solo parecen ser sacudidas por los entusiastas comentarios de los lugareños sobre el tema de actualidad: los ovnis.

En el terreno de las hipotesis, se nos plantea una pregunta: ¿Que significacion puede adquirir en este muchacho ser participe del episodio narrado? Si bien la experiencia fue compartida con tres personas mas, no hay duda que fue el joven quien logro un avistamiento mas completo e integral: como era de esperar, esto favorecio que el fuese el mas asediado por el valor de su testimonio.


Roberto Perez, en el camino de acceso al Hogar

Fabulacion o realidad -no es lo mas importante en este analisis- su persona se reviste de un estatuto relevante: Merced a su relato, alguien casi anonimo, uno mas, pasa a ser ROBERTO PeREZ, alcanzando el reconocimiento de los otros, pudiendo ser “protagonista”. Buscado en lugar de abandonado, existe para los demas, obtiene cierto prestigio y valorizacion. Aquel de pocas palabras, a partir del suceso del 13 de agosto de 1991, encuentra un espacio.

Los testigos participes de esta experiencia fueron cuatro; tres de ellos aseveran haber visto “dos pares de piernas (o patas)”, y unicamente Roberto Perez asegura que se trataba de seres completos.

Cualquiera de estas afirmaciones es posible de un desarrollo interpretativo, tendiente a encontrar una explicacion en el contexto de la historia particular de cada sujeto; aunque es necesario aclarar que el tiempo y las condiciones que primaron para la realizacion de entrevistas y encuestas fueron limitadas por diversas circunstancias.

Volviendo a quien nos ocupa en este momento, Roberto Perez, en una situacion similar en cuanto a iluminacion, distancia, etc., dice que observo “dos personas completas” realizando movimientos ondulantes. ¿Se trata acaso de una fabulacion?

No nos es posible arriesgar una respuesta contundente, ya que no se la puede corroborar con la opinion del joven Perez. Sin embargo, podemos ensayar una interpretacion, especulativa, basamentada en elementos extraidos de su propio discurso. Seria dable pensar que esas dos figuras vistas (proyectadas) en el exterior, creadas por la fantasia a partir de un estimulo externo y concreto, vienen a llenar aquello que en el permanece vacio. Ocupan el lugar de esas dos imagenes inciertas desde siempre, dos figuras, que no son cualesquiera en la historia de un sujeto: Esos dos seres completos que vio representarian aquello que en su vida es faltante, su padre y su madre.

De ello nace una situacion en la cual una posible realidad fisica da el motivo para que se manifiesten contenidos psiquicos latentes.


Roberto Banchs atiende el relato del joven Roberto Perez en la tranquera. Al fondo, fachada del edificio, desde cuyas ventanas y escalinatas siguieron la presencia de los fenomenos

De los testigos entrevistados, Miguel Dionisio es la persona que brinda un material mas claro, detallado, con un orden preciso y mayor aportacion de datos; colabora de manera especial durante la entrevista. En su personalidad se detectan rasgos de histrionismo y extroversion. Es posible que esto se apoye -ademas- en su necesidad de hallar una explicacion a lo que es para el un interrogante: la existencia de estos “seres”, pregunta a partir de la cual se insertan otras que circundan un vacio que hay en el saber. De todos modos, el intenta dar lo que tiene, informacion que intercambia por una respuesta.

Como el resto de los testigos, se pone en juego el deseo de reconocimiento. Algo se modifica en cada uno de ellos a partir del 13 de agosto, viven un episodio que no es sin consecuencias.

En el caso que nos ocupa, a M. Dionisio lo llaman los amigos, el Intendente de Victoria; no creemos que sea ingenuo el comentario que se transcribe: “Hace una semana lo encontre en un asado (se refiere al Intendente) me pidio que nos sentaramos juntos y le narrara lo sucedido personalmente, estaba el director del Hogar”.

Es evidente que un distintivo prestigio siente que adquirio, con el que pareciera buscar en el otro su aceptacion, no pasar desapercibido.

Hay una frase que se nos torna enigmatica, ya que si se profundiza en ella, alejandonos de lo dicho literalmente, puede tomar diferentes estatutos: “Tengo que verlo para creerlo”. Por un lado, como lo indica el mismo sujeto desintencionadamente, el fenomeno que presencio no fue inesperado: el queria ver, en la entrevista manifiesta: “fue una experiencia que jamas crei vivir, fue algo inesperado, a pesar que siempre afirmaba ‘tengo que verlo para creerlo’”, citando a Santo Tomas. Por otra parte, se le presenta una demanda explicita de su hija, quiere que la lleve a ver los ovnis; pero no puede satisfacerla, dificultad que se sostiene en ciertos visos de incredulidad puesto que el “no vio”, y desde alli le responde “tengo que verlo para creerlo”. ¿Se sostiene el rotulo de casualidad ante el hecho de que haya sido durante la noche inmediatamente posterior a esta conversacion con la niña, que Miguel Dionisio haya podido “ver”?. Creemos que no, por el contrario, diriamos que es a partir de este suceso que el podria conformarla. Ademas, surge en Miguel Dionisio un nuevo elemento con el que lograra enaltecer su persona frente a los ojos de su hija: Pensamos que para este sujeto es este el estimulo interno principal, que explicaria y justificaria la causa de haber sido testigo del fenomeno que relata. Lo verificamos tambien, en otro comentario extraido de la entrevista: “Hace quince dias con mi hija, mi señora y una vecina vimos unas luces, entonces yo les dije: ‘Ahi estan los ovnis’”. Algo de la idealizacion frente a quienes le rodean -especialmente- en lo relativo a sus familiares, toma una importancia relevante.

En cuanto a Fidel Rene, es empleado del Hogar de jovenes General San Martin, y fue el primero que se enfrento con el ovni y dio la voz de alerta a los testigos restantes, permitiendo su participacion.

Impresiona como un sujeto apacible, sereno y algo enigmatico, puesto que cierto halo de misticismo parece envolver su presencia, intentando transmitir a los otros cierta paz que, sin embargo, se contrapone con su penetrante mirada.

Es pastor evangelista, y gran parte de su tiempo lo dedica a esta practica.

La “palabra de Dios” anuncia el fin del mundo, el preludio seran catastrofes, caos y padeceres. En la Biblia se prometen “señales” de aquello que advendra en algun tiempo, todavia desconocido.

Alli donde hay falta en el saber, es necesario el armado de una teoria, y para ello nada mejor que la creacion de una fantasia. Es evidente que este hombre vive esperando el cumplimiento de aquello que -bajo la formula de una promesa- se manifiesta. Detectar pistas, indicios concretos de lo que la “palabra” Suprema, con rango de Ley, anuncia.

Creemos que el avistamiento del 13 de agosto se constituye para F. Rene en un episodio que refuerza su fe. La explicacion que el encuentra y necesita, no es otra que la confirmacion y realizacion de que eso que el cree y transmite tiene estatuto de Verdad.

ALGUNAS REFLEXIONES EN TORNO AL CASO

La percepcion por parte de los celadores de “un par de piernas”, y la de dos cuerpos enteros de los ocupantes del ovni testimoniada por el interno Perez, es motivo de otras reflexiones. De acuerdo a las mediciones que realizamos en el lugar, la distancia estimada entre el borde del pavimento de la ruta 11 (donde se detuvo el ovni) y la escalinata de acceso al edificio del Hogar (alrededor del cual se situaron los cuatro testigos), es de 265 metros.

Resulta muy improbable que aun un observador avezado pueda distinguir a esa distancia y con la precision descripta la figura de un sujeto de “talla normal”. Al respecto, el relato de Roberto Perez resulta muy sugerente: el señala que del objeto en forma de olla descienden frente a la entrada del Hogar dos siluetas negras, sin tocar el asfalto, caminaban por encima de este, levitando. Cuando le preguntamos como le fue posible apreciar esos detalles no vistos por los demas, responde que “fue asi” y que continuo observando todavia mas al aproximarse 100 m (esto es, a unos 265 m), notando que la cabeza de las entidades “era rara, medio levantada”, asegurando que lo unico que no llego a percatarse fueron las manos. Todo esto, segun el joven, se extendio por un minuto.

Los testimonios que ofrecen los celadores, en cambio, pueden parecer mas moderados, pero no dejan de ser ciertamente fantasticos. Ellos no hablan de ningun objeto metalico, sino de una luz; tampoco de personas “completas”, sino de pares de piernas. Miguel Dionisio incluso desmiente al joven Perez, negando que haya visto los cuerpos enteros. Se trataba, segun Dionisio, “como dos pares de piernas que dan pasos, pero en estado de gravedad”. Una descripcion similar a la de Fidel Rene, aunque para el la luz se poso sobre el asfalto -en vez de suponer que se mantuvo suspendida sobre la banquina-, y las piernas “se veian en pantalones comunes, no estaban desnudos”.

Ambos coinciden en que fue por el movimiento, de caminar, por el cual infirieron que se trataba de piernas, como de hombre. Es interesante advertir el modo en que se ha escalado con la percepcion: primero observan un movimiento semejante al caminar, por lo que se persuaden que se trata de piernas (“yo vi piernas, pero no creo que sean solamente piernas que se deslizan”, dice Miguel Dionisio); luego, a partir de un detalle se remiten al todo, logicamente se trata ahora de las piernas de los ocupantes de la luz, o sea, del ovni. Ocupantes cuya silueta completa y en detalle es descrita por el interno Roberto Perez.

Tal modalidad de globalizar en forma confabulatoria (DW), esto es, de construir la realidad a partir de un dato, es un signo de Rorschach (RO) indicador de angustia, ansiedad e inhibicion, que suele darse en sujetos de poca inteligencia. Podria no ser casual que tales caracteristicas se observan en el joven R. Perez.

Reconstruyendo los hechos in situ, al ovni se lo ve siempre proximo al horizonte, aun cuando los testigos calculan que se elevo en algun momento a miles de metros. Aparece al sudeste como una pequeña luz, de cierta magnitud, y se desplaza en direccion oeste.

La vision del fenomeno se obstaculiza en forma intermitente por la arboleda, matorrales y alguna edificacion. En apariencias, esa primera luz se descompone en dos, una amarilla y otra roja, que zigzaguean alternadamente variando su altitud hasta convertirse en un circulo de luz blanca que se detiene, precisamente, ¡en la entrada del establecimiento!, en el cruce de la ruta 11 con el camino de acceso, sobre el pavimento o en la banquina (area de aparcamiento). Alli “descienden” los dos ocupantes, o pares de piernas, parecen caminar en el aire y en momentos en que se acerca un camion por las andanadas del camino, la luz simplemente se apaga y desaparece de la vista. Habia transcurrido un minuto de observacion de las entidades, y cuatro desde que irrumpio aquella primera y lejana luz que seria la misma –o no- que se aposento frente al hogar.

Nada parecia perturbar la oscura y serena noche, que mostraba una incipiente Luna en su tercera fase (fraccion iluminada: 22.33%).

Llama la atencion el comportamiento del ovni: sigue la sinuosidad y ondas del camino, y “aterriza” justo frente al Hogar, en el cruce de los caminos y sobre la superficie de asfalto, o bien, en la faja de aparcamiento para vehiculos…

Los celadores dicen al respecto: “No era luz de faro de un auto que hubiere proyectado, y esta era local (…), no se proyectaba”, sostiene M. Dionisio. “No era la luz de un vehiculo -afirma F. Rene-, (sino) como un proyector fuerte que brilla…”. Tales impresiones no parecen muy consistentes al momento de considerar la posibilidad que pudiera tratarse de los faros de algun vehiculo, o una reflexion de la luz.

No obstante, estimamos que -al presente- no se disponen de los suficientes parametros de informacion para pronunciarse firmemente sobre la naturaleza de lo avistado. En cambio, a vista de lo expuesto, los testimonios presentan serias dudas en cuanto a la legitimidad de los hechos descritos.

A MODO DE CONCLUSIoN

El caso ocurrido en el Hogar General San Martin nos permite examinarlo desde distintas perspectivas. Es obvio que la ufologia no es una ciencia, pero es pertinente señalar que se nutre de numerosas disciplinas tecnicas y cientificas. Su delimitacion no es facil y su reconocimiento lo es menos aun. Tiene por objeto de estudio las manifestaciones aereas anomalas, conocidas habitualmente como ovnis, y se orienta a su dilucidacion acaso definitiva. Planteado de este modo, apunta a un saber de lo no-sabido, o si se prefiere, a la eterna tarea de identificar los no-identificados.

No obstante, el camino puede ser otro que el de la mirada al fenomeno y a las condiciones fisicas en que se desenvuelve, cuando las mismas tornan improbable reconocer algo a semejante distancia y de la manera en que se describe.

Alli encuentra su campo de aplicacion la singular perspectiva planteada en este articulo, la cual -lejos de incurrir en una suerte de reduccionismo psicologista-, debemos pensarla en la esencia misma del problema, dado que la base de la investigacion es el hombre.

Al respecto, señalemos que la historia del sujeto actua como un condicionamiento de la actividad perceptiva, con una dependencia de significacion de origen cultural.

Asi visto, el episodio que hemos expuesto no podria ser examinado debidamente si no atendieramos a la persistente ola de informacion registrada en Victoria, como el modo en que esta actua.

La situacion descrita ha operado -sin lugar a dudas- como poderoso factor condicionante en la percepcion de fenomenos inusuales, trayendo como consecuencia un incremento de los informes reportados, y una subsecuente retroalimentacion.

En otro nivel de analisis, como rasgo todavia mas particular impuesto a este trabajo, se hallan las motivaciones individuales de cada observador -independientemente de la naturaleza del fenomeno- que, como hemos visto, se vinculan en forma inexorable a una expresion de valores y de trascendencia.
REFERENCIAS

La Capital, Mar del Plata, 19 de agosto de 1991.

Los Andes, Mendoza, 19 de agosto de 1991.

El Cronista Comercial, Buenos Aires, 19 de agosto de 1991.

La Razon, Buenos Aires, 19 de agosto de 1991.

El Heraldo, Concordia, 20 de agosto de 1991.

El Debate-Pregon, Gualeguay, 20 de agosto de 1991.

Clarin, Buenos Aires, 17 de septiembre de 1991.

El Popular, Olavaria, 18 de septiembre de 1991.

Flash, Buenos Aires, 20 de septiembre de 1991